13/12/2025
12:01 AM

Astronautas hacen caminata; grieta preocupante en transbordador

Dos de los astronautas que llegaron a la estación internacional a bordo del transbordador Endeavour realizaron el sábado su primera caminata espacial para instalar una nueva viga en la base orbital.

Dos de los astronautas que llegaron a la estación internacional a bordo del transbordador Endeavour realizaron el sábado su primera caminata espacial para instalar una nueva viga en la base orbital.

Al mismo tiempo, los ingenieros en tierra analizaban las imágenes de una inquietante grieta descubierta en el escudo de la nave, el cual la protege del inmenso calor al reentrar a la atmósfera terrestre.

Los astronautas inspeccionarán la zona dañada, un cuadrado de unos 7,6 centímetros de lado (tres pulgadas), con más detenimiento el domingo. La tripulación recurrirá entonces al brazo robótico de la nave, el cual tiene una longitud de 33 metros (100 pies), y un elemento de extensión.

La tripulación someterá la zona difícil de alcanzar a pruebas con rayos láser. Hasta entonces, la NASA sólo cuenta con imágenes de cámara y de radar para hacer conjeturas.

Los directores de la misión sospechan que un pedazo de hielo se desprendió del tanque externo de combustible del Endeavour un minuto después del despegue el miércoles, dañando las baldosas de aislamiento contra el calor ubicadas en la parte inferior del transbordador, cerca de la puerta derecha del tren de aterrizaje principal.

El hielo es más pesado que el aislamiento de espuma del tanque, e incluso un pequeño pedazo es capaz de causar daños graves al aislamiento térmico del transbordador.

El área donde ocurrió la grieta estará expuesta a temperaturas tan altas como 1.260 grados centígrados (2.300 Fahrenheit) durante el reingreso. La inspección del domingo con láser determinará exactamente qué tan profundo es el daño. Los ingenieros decidirán entonces si se necesitan hacer reparaciones en el espacio.

Los daños que recibe la coraza del transbordador se han convertido en un elemento clave de preocupación desde el desastre del Columbia en el 2003.

Ese transbordador se desintegró el 1 de febrero del 2003 cuando volaba sobre el estado de Texas. Los siete miembros de la tripulación perecieron a bordo.

La NASA concluyó que un pedazo de espuma de 68 gramos de peso (1½ libra) que golpeó el ala izquierda durante el despegue hizo un agujero de entre 15 y 25 centímetros (seis y 10 pulgadas de extensión). Las alas del transbordador son especialmente vulnerables y están sujetas incluso a más calor durante el reingreso a la atmósfera.

En la caminata espacial del sábado, los astronautas Rick Mastracchio y Dave Williams ayudaron a instalar una viga de unas 2,03 toneladas métricas (dos toneladas) con forma cuadrada al espinazo de la estación.

La viga y otros equipos para la estación, que fueron transportados por el Endeavour, serían instalados a la base orbital durante por lo menos otras dos caminatas espaciales más en los próximos días.

El astronauta Charles Hobaugh, usando el brazo robótico de la estación espacial, colocó la viga en su lugar, mientras Mastracchio y Williams flotaban en las cercanías, actuando como guías. Una vez que la viga se acopló a la estación, los dos caminantes espaciales empezaron un trabajo meticuloso para asegurarla con tornillos y correas.

La NASA espera mantener al Endeavour acoplado a la estación espacial durante por lo menos siete días y posiblemente hasta 10 días, lo que sería un récord. El transbordador está provisto con un nuevo sistema que le permite tomar energía eléctrica de la base orbital. Se espera que los directores de misión decidan el domingo si es necesario que la tripulación se quede en la estación algunos días adicionales.

El jefe del equipo de control de la misión, John Shannon, señaló que en caso de una emergencia, el Endeavour podría permanecer en la estación espacial dos meses por lo menos. Otro transbordador de rescate podría lanzarse en octubre.