La aplicación de las pruebas censales de matemáticas y español en las escuelas bilingües comenzó ayer con muchas dificultades.
Los maestros, por ejemplo, debieron leer y explicar cada una de las preguntas para hacer la evaluación.
Felipe Alberto Soto, presidente del Consejo de Colegios Bilingües de Francisco Morazán, señaló que los niños de primer a cuarto grado no tienen capacidad cognitiva para hacer las transferencias de conocimiento de español a inglés.
Los directores de los centros educativos señalaron que este tipo de evaluaciones debería ser más orientado y aplicado con base en la metodología de enseñanza y el idioma que predomina en estos centros. Evidentemente se les hace más difícil leer en español que en inglés, pues “nuestro sistema metodológico de enseñanza es cien por ciento bilingüe”, dijo.
Alberto Soto detalló que los alumnos comienzan a tener esa madurez cognitiva cuando llegan al sexto o séptimo grado. Con ellos no hay problemas.
“Sin embargo, un niño de primero o segundo, a quien se educa con puro inglés, sin siquiera hablarle en español, tiene dificultades para responder las preguntas en español”, argumentó Alberto Soto.
Sugirió que a medida que avance la aplicación de estos exámenes se vayan perfeccionando y evitando este tipo de contratiempos. A finales del año anterior, el ministro de Educación, Marlon Escoto, definió que las pruebas de rendimiento académico ya no se efectuarían de manera aleatoria, sino censal, es decir a todos los estudiantes. De sea forma se determinó que todos los alumnos entre primer y noveno grado de todo el país tendrán esta evaluación.