El gorgojo descortezador sigue atacando los pinos en Honduras. Los bosques de 11 de los 18 departamentos son zonas de riesgo por la plaga: más de 8,000 árboles fueron cortados.
El Comité Nacional de Protección Forestal de Áreas Protegidas y Vida Silvestre (Conaprofor), a través del acuerdo 001-2024 publicado el 26 de abril en el Diario Oficial La Gaceta, estableció a los departamentos de El Paraíso, Lempira, Comayagua, Choluteca, Intibucá, Francisco Morazán, Copán, La Paz, Ocotepeque, Yoro y Olancho como zonas de peligro por la susceptibilidad de afectación por el diminuto insecto.
Las autoridades reconocen que este año los brotes y ataques de este insecto no dejaron más daño que el reportado entre 2014 y 2017, que arrasó con gran parte del bosque hondureño. Pero buscan prevenir más daños.
En los departamentos declarados hay 378,471.1 hectáreas de bosque de pino que son vulnerables al ataque de la plaga, y la probabilidad de afectación es mayor al 40%, de acuerdo a las proyecciones basadas en el mapa de riesgo del Instituto de Conservación Forestal (ICF).
Mientras el área con un riesgo mayor al 60% es de 137,310.1 hectáreas, eso representa alrededor del 6.17% del área total del bosque de pino.
En esos 11 departamentos, a los que se suman algunos municipios de Cortés y Gracias a Dios se han identificado en lo que va de este año 490 infestaciones o brotes del escarabajo descortezador, afectando a 173.78 hectáreas, según el Sistema de Información para la Gestión y Monitoreo Forestal (Sigmof) del ICF.
Roxana Torres, jefa del departamento de salud y sanidad forestal del instituto, aseguró que la presencia de este insecto en los bosques hondureños es normal.
“En comparación con los umbrales que tenemos para declarar emergencia tenemos poco, porque para declarar una emergencia estamos hablando de 1,845 hectáreas afectadas que debe haber y que sea por el género dendroctonus frontalis que fue el que provocó una gran afectación entre 2014 y 2017”, dijo.
La experta en el manejo forestal detalló que actualmente el bosque de pino se está viendo afectado por el escarabajo llamado IPS, que es un descortezador secundario que normalmente ataca los árboles de pino después que ataca el primario (dendroctonus frontalis); así como árboles que están debilitados o muertos.
Este año el cambio climático ha jugado un papel importante en la propagación del insecto; la presencia del fenómeno de El Niño que provocó una fuerte sequía en el país, y los incendios forestales que a la fecha suman 2,723 y han afecta a más de 285,000 hectáreas de bosque han vuelto susceptibles a los pinos ante los ataques de la plaga.
“Al encontrar las condiciones idóneas de temperatura y humedad para su reproducción y que los árboles estén debilitados por las condiciones del fenómeno de El Niño, la sequía, incidencia de incendios, eso favorece al insecto para aumentar sus poblaciones y el ataque, y desfavorece a los árboles volviéndolos bastante vulnerables al ataque de estos insectos”, detalló la experta.
El gorgojo descortezador en los últimos seis años (2019-2024) ha afectado 2,129.49 hectáreas de bosque de pino en el territorio, siendo el departamento de El Paraíso el mayor afectado durante ese período con más de 1,000 hectáreas afectadas, de acuerdo a los datos del ICF.
Los años donde más afectaciones de pinos se dieron fue en 2020, con más de 626 hectáreas dañadas; en 2019 se infestaron de la plaga 556 hectáreas y en 2022 resultaron afectadas 353 hectáreas.
Los datos muestran que entre abril y octubre es cuando se registran los picos más altos de brotes y de áreas afectadas, por lo que las autoridades del ICF a través del Conaprofor emitieron la declaratoria de riesgo con el fin de evitar una mayor crisis ambiental, similar a que provocada entre 2014 y 2017 cuando se perdieron cerca de 500,000 hectáreas de bosque de pino.
Para controlar y eliminar el ataque del gorgojo, técnicos del ICF deben cortar los pinos infestados y descortezarlos, es decir, quitarle la corteza al árbol para exponer la plaga y evitar que se propague a otros pinos.
Los más afectados son los bosques privados
Para Sonia García, presidenta del Colegio de Profesionales Forestales de Honduras (Colproforh), los ataques de la plaga han disminuido la cobertura forestal en gran parte, la experta recordó que entre el 2014 y 2017 hubo una disminución significativa de aproximadamente 500,000 hectáreas de bosque que fueron afectadas por el gorgojo.
Las afectaciones han sido en su mayoría en bosques privados, por lo que después del ataque muchos dueños hacen cambios de uso de suelo, lo que ha ocasionado que la cobertura forestal esté disminuyendo.
Aunque una parte fue regenerada naturalmente y por regeneración asistida, la mayor parte de esas hectáreas se aprovecharon para hacer cambios de uso de suelo y no se dejó que se restableciera la generación natural, eso ha estado afectando drásticamente y lo hemos sentido con los efectos del cambio climático que cada vez son más fuertes en el país, señaló García.
“No podemos destruir nuestras fuentes de agua, nuestras zonas protegidas para otras actividades que si bien en la parte económica son rentables, pero en lo ambiental estamos destruyendo los ecosistemas del país”, enfatizó.