El Centro Nacional de Sangre de la Cruz Roja Hondureña se volvió insuficiente para atender a las personas que llegan en busca de una tarjeta de salud.
Desde las primeras horas de la mañana de ayer, centenares de jóvenes hicieron largas filas para sacarse una muestra de sangre y con los resultados obtener el documento oficial que los institutos solicitan al momento de matricularse en los diferentes niveles educativos de los centros de enseñanza de la ciudad capital.
Los futuros estudiantes se dieron cita en las oficinas ubicadas entre la primera y segunda avenidas de Comayagüela, donde se aglomeraron en la acera, a una considerable distancia de la entrada principal del inmueble, en espera de su turno.
Todos los años, especialmente en los dos primeros meses, las instalaciones de la Cruz Roja Hondureña se vuelven insuficientes para atender a los jóvenes ya que según los encargados del banco de sangre, casi siempre dejan este trámite para última hora.
“Estamos desde la mañana esperando que se nos atienda porque necesito la tarjeta de salud ya que me la piden en el colegio. Voy a tercer curso y éste es uno de los requisitos que nos piden para matricularnos, al igual que en los años anteriores”, dijo Marta Lorena Munguía, estudiante de educación media.