Tegucigalpa, Honduras.
Un total de 29 personas resultaron con lesiones luego de manipular pólvora en las fiestas de fin de año.
Hasta el 31 de diciembre por la tarde en los centros asistenciales públicos se había atendido a 18 niños y adultos que sufrieron quemaduras en su cuerpo, la mayoría afectados entre el 24 y 25 de diciembre.
Sin embargo, entre la víspera de Año Nuevo y las primeras horas de la madrugada del 1 de enero de 2020 resultaron quemadas 11 personas más.
En total ingresaron 11 personas al Mario Rivas, 10 al Hospital Escuela, seis al Fundaniquem y dos al IHSS del barrio La Granja.
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Julia Sánchez, vocera del hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, detalló que entre los ingresados al Rivas en la víspera de 2020 figuran una niña de 12 años procedente de Santa Bárbara, que sufrió quemaduras de grado tres en la mano derecha y presentó daños en cuatro dedos; pero favorablemente no tendrá pérdida de alguno de ellos.
El segundo caso fue un joven de 15 años de Villanueva al que le explotó un mortero en la mano derecha y se le tuvo que amputar el dedo medio y tuvo una fractura en el dedo índice. A estos dos casos se sumaron un adulto de 42 años de San Manuel que por una explosión de un mortero en la mano derecha perdió el dedo pulgar y resultó con fractura del dedo índice.
Asimismo, reportó un adulto de 50 años de San Pedro Sula que sufrió quemaduras de grado tres en la mano derecha y tuvo daños en cuatro dedos por la explosión de un mortero, pero sin pérdidas.
Al hospital de especialidades del IHSS del barrio La Granja de la capital ingresaron la noche del 31 de diciembre dos jóvenes de 21 y 23 años que resultaron con quemaduras por pólvora, según informó Ana Lourdes Barrientos, portavoz del centro asistencial.
El 2018 cerró con registro de 64 personas atendidas por manipulación de pólvora, es decir, que hubo una disminución de casi el 50% de casos con relación a 2019.
