San Pedro Sula, Honduras.
¿Tiene hijos adolescentes y están con sobrepeso? ¡Cuidado! Esas libras de más no solo lo perjudicarán en la edad adulta con un aumento en el riesgo de enfermedades del corazón, alta presión o diabetes, también lo ponen en peligro de sufrir esclerosis múltiple. Las personas que están obesas tienen menos niveles de vitamina D en comparación con quienes no tienen este peso excesivo.
Además, el tejido graso produce sustancias que afectan al sistema inmune y se cree que ciertos tipos de actividades celulares están asociadas a esta enfermedad.
Antonio Valverde, médico especialista en Neurología y Medicina Interna, dice que los más afectados por la esclerosis múltiple son las personas de 20 a 40 años; sin embargo, estudios han comprobado que las adolescentes con sobrepeso son dos veces más propensas a padecerla.
“Esta es una enfermedad producida por la inflamación autoinmune. Es el mal neurológico no traumático que más discapacita a las personas en edad”, expresa Valderde, quien es uno de los especialistas del taller “Cómo contar historias sobre esclerosis múltiple”, convocado por la fundación Gabo y Novartis.
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Según estudios, una vez los niños obesos son diagnosticados con esta enfermedad tienden a tener una peor respuesta al tratamiento inicial que los niños con un peso promedio.
La esclerosis múltiple es un trastorno neurológico provocado por un ataque desatinado del sistema inmunitario en la mielina, que es el recubrimiento protector que rodea a las fibras nerviosas de la médula espinal y el cerebro, del propio cuerpo.
Se mantiene como la segunda causa de discapacidad en jóvenes en edad productiva, solo detrás de los accidentes de tránsito, pero un diagnóstico oportuno puede ralentizar el proceso de deterioro, dijeron este lunes especialistas.
Los efectos
Los primeros síntomas más comunes son debilidad muscular, borrosidad visual, visión doble, inestabilidad, dificultad para mantener el equilibrio, vértigo y hormigueos en extremidades.
Aproximadamente, el 50% de los pacientes con esclerosis múltiple desarrollan deterioro cognitivo en forma de alteración de la memoria, de la capacidad de atención y de procesamiento de la información, lo que repercute de manera directa en su ámbito profesional.
Los pacientes con esclerosis múltiple tienen más riesgo de desarrollar comorbilidades psiquiátricas u otras enfermedades como ictus o epilepsia, que pueden incrementar la tasa de brotes y aumentar la discapacidad que desarrollan.
En el 90% de estos pacientes produce episodios de disfunción neurológica, llamados brotes, que pueden durar días o incluso semanas y que suelen remitir parcial o totalmente.
“Los factores de riesgo son varios; por ejemplo, en el caso de gemelos homocigotos, si uno tiene la enfermedad, hay un riesgo de 20 a 30% de que el otro la padezca.
En los hermanos hay probabilidades menores de 2 a 3%. Además de genética, también influyen el factor ambiental, el tabaquismo y los cambios de turnos laborales”, expresó el especialista.
Surgen esperanzas
La esclerosis múltiple es una enfermedad neurodegenerativa que afecta a 2.5 millones de personas en el mundo.Sin tratamiento, una parte importante de estos pacientes desarrolla a lo largo de la evolución de enfermedad lo que se denomina formas secundariamente progresivas, en las que el deterioro neurológico progresa casi siempre sin evidencia de dichos brotes. Sin embargo, los avances en los tratamientos son una esperanza.
Los pacientes con esclerosis múltiple quizá puedan pensar con un poco más de claridad y moverse con mayor facilidad si se someten de forma regular a entrenamiento vibratorio de todo el cuerpo, informa un nuevo estudio publicado en The New York Times.
El entrenamiento vibratorio implica pararse en una plataforma que se agita con rapidez.
Las vibraciones de alta velocidad obligan a los músculos a contraerse y a relajarse docenas de veces por segundo, aunque parezca que la persona solo está ahí parada pasivamente. Además del suministro de nuevos fármacos de gran eficacia.
Controle su peso
-Evite el exceso de bocadillos, refrescos, dulces. Aumente la ingesta de frutas, verduras, lácteos, legumbres o cereales integrales.-Las prácticas deportivas son perfectas, ya que estimulan e incitan a moverse.
-No olvide los hidratos de carbono. Cereales y legumbres nos aportarán energía y fibra.
-Come despacio y sin distracciones. La televisión y los videojuegos están de más en la mesa
