Rasel Tomé envía mensaje a Mel Zelaya tras derrota de Libre
“El tiempo de guardar silencio llegó a su fin”: Rasel Tomé expone los motivos que, a su juicio, provocaron la caída del Partido Libre.
- Actualizado: 12 de diciembre de 2025 a las 15:42 -
Rasel Antonio Tomé Flores, vicepresidente del Congreso Nacional y dirigente del Partido Libertad y Refundación (Libre), hizo pública este viernes una carta abierta dirigida al expresidente hondureño Manuel Zelaya Rosales, coordinador general de esa organización política, en la que plantea una reflexión crítica sobre el rumbo del partido tras los resultados electorales del 30 de noviembre de 2025.
En la misiva, Tomé reconoce el papel histórico de Mel Zelaya en la fundación de Libre y en la resistencia posterior al golpe de Estado de 2009, señalando que su liderazgo fue clave para construir la esperanza de amplios sectores de la población hondureña.
No obstante, el congresista sostiene que los liderazgos políticos deben evolucionar para responder a nuevas realidades, y advierte que los recientes resultados electorales representan un llamado de atención para el partido, al considerar que el desempeño obtenido no refleja el capital político que Libre debería tener.
Tomé se refiere de manera directa a la candidatura presidencial de Rixi Moncada, a quien describe como una técnica de reconocida capacidad, pero subraya que el 19.30 % de los votos alcanzados obliga a una autocrítica profunda.
Aunque menciona la injerencia externa del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a través de redes sociales, aclara que atribuirle toda la responsabilidad sería, a su juicio, un error estratégico.
En su análisis, el dirigente de Libre compara la situación del partido con el colapso del Movimiento al Socialismo (MAS) en Bolivia, al que atribuye su debilitamiento al caudillismo y a la incapacidad de gestionar una sucesión de liderazgo que trascendiera a una figura central.
Según Tomé, este fenómeno de personalización del poder también se ha manifestado dentro de Libre mediante decisiones que han marginado liderazgos y debilitado la democracia interna del partido, generando descontento en las bases.
Entre los ejemplos mencionados en la carta figuran el caso de la diputada Isis Cuellar, Rafael Sarmiento en Olancho, el bloqueo al liderazgo de Rudo Pastor en San Pedro Sula, las limitaciones políticas enfrentadas por Oved López en Francisco Morazán y la situación de Silvia Ayala en Cortés, además de otros dirigentes a nivel nacional.
El vicepresidente del Congreso afirma que estos casos no son hechos aislados, sino síntomas de un modelo de conducción que, según su planteamiento, rechaza la crítica, reprime la renovación interna y castiga a quienes cuestionan las decisiones de la cúpula partidaria.
Tomé asegura que existe una “mayoría silenciosa” dentro del partido que comparte estas preocupaciones, pero que teme expresar públicamente sus opiniones por posibles represalias, razón por la cual decidió hacer pública su postura.
En la carta, el dirigente anticipa una posible campaña de descalificación en su contra y menciona que podrían revivirse señalamientos como su inclusión en la llamada lista Engel, la cual afirma fue promovida, según su versión, por actores del propio partido mediante gestiones en Washington.
Asimismo, advierte que está dispuesto a asumir las consecuencias de su pronunciamiento, incluso una eventual expulsión de Libre, al considerar que guardar silencio frente a lo que describe como un proceso de deterioro interno sería una forma de complicidad.
Finalmente, Rasel Tomé hace un llamado a la renovación del partido, al surgimiento de nuevos liderazgos y a una reconstrucción política desde las bases.
Tomé reiteró que el Partido Libre pertenece a su militancia y que, desde su perspectiva, solo con unidad y autocrítica podrá volver a consolidarse como una alternativa de poder en Honduras.