Cristian Castro dice que le encanta el “afeminado satánico”
El cantante mexicano está en una nueva etapa, ha dejado a un lado sus baladas románticas para liderar una banda de rock metálico en la que libera su lado femenino y oscuro.
- 24 septiembre 2023 /
- 1 / 12
Cristian Castro explicó a Rolling Stone en español que entró al rock por el Alive II (1977) de Kiss, que en un viaje a la Argentina con su célebre mamá (la actriz Verónica Castro) descubrió a Soda Stereo y se le “dobló el cerebro”, que también tuvo su fase gótica con The Cure y le gustaba el glam metal.
- 2 / 12
“Tengo dos bandas muy claras: Duran Duran y Mötley Crüe. Ahí estallo a la onda new romantic, con un Duran Duran galante, seductor, pop, bien vestido, peinado, muy cheto, pero también muy afeminado. Igual que Mötley, que es muy afeminado, pero a la vez son satánicos”, dijo el cantante.
- 3 / 12
“El afeminado satánico se combina y a mí me fascina”, explica casi con vocación docente. Queda anotado en el cuadernito que el afeminado satánico (“que no tiene por qué ser gay”, aclara él) funciona como síntesis de su carrera y su imagen pública.
- 4 / 12
Cristian Castro lanzó su primer álbum de rock en 2014, denominado “El cantar de la muerte”, pero no mucha gente se enteró: el tema con más reproducciones es “Beso negro” con 148 mil escuchas en Spotify. Una cifra respetable para una banda under, pero casi nada comparado con los 254 millones de plays que tiene “No podrás”, su hit número uno lanzado en 1992.
- 5 / 12
Castro pretende ahora que su nuevo álbum refleje al fin al jovencito que se paseaba por el mundo enamorando chicas con “Vuélveme a querer” para después encerrarse en su cuarto a escuchar a todo volumen a Machine Head.
- 6 / 12
En “El poder de la bestia”, su nuevo proyecto, Cristian va a lo profundo, salta entre estilos y demuestra una vez más ser un cantante descomunal, capaz de pasearse del gruñido al agudo de cabeza sin complicaciones. Eso que sale de los bafles de Unísono no tiene absolutamente nada que ver con su veta romántica, ni tampoco con la versión delirante de “Lloviendo estrellas”.
- 7 / 12
El segundo disco de La Esfinge no es otra cosa más que Cristian Castro dejando en claro que puede hacer heavy metal sin que se le vean los hilos.
- 8 / 12
Otra fabulosa síntesis de su carrera y sus gustos: Cristian reveló que le gustaba el heavy cuando se dejó ver el tatuaje de la llave inglesa en forma de miembro masculino que funciona como logo de Tool en el video de “Azul”. Estábamos filmando en la playa, se pudo ver el tatuaje y la gente lo confundió. Entre el pelo –que lo tenía largo y rubio– y el tatuaje, se llegó a la idea de que yo quizás era gay y por eso tenía una simulación de un tema fálico en la espalda. Como que tenía un pene ahí en la espalda, pero no: es el símbolo de la banda de rock”, dice.
- 9 / 12
Esa combinación de oscuridad y hedonismo lo sedujo para siempre: “Me interesa mucho el cuerpo a cuerpo. Lo necesito mucho, me alimenta. He creído mucho en los asiáticos por eso: porque le hacen mucho tributo a los órganos sexuales, entonces para mí la sexualidad es algo que realmente reina mucho el poder de una persona, inclusive en lo artístico.
- 10 / 12
El artista también dijo que, contrario a lo que muchos han de pensar, él no consume alucinógenos: “Yo soy antidroga y anticigarrillo. Siento que son antigüedades del siglo pasado. Me parece muy antiguo que alguien fume porro”.
- 11 / 12
En medio de la conversación en su departamento cuenta que está haciendo su primer álbum en inglés. “Me puse como propósito que sea el disco más triste de la historia”, dice. Cristian es otro: canta en un susurro apagado, con la falta de entusiasmo de alguien completamente vejado por la vida. El hombre es una caja de sorpresas: no contento sólo con ser melódico y metalero, también es dark y deprimente.
- 12 / 12
“Quien me sigue sabrá que yo no puedo hacer nada sin Cristian Castro, el romántico. Es el verdadero actor de todo esto y no ha cambiado para ser rockero: es Cristian Castro que hace La Esfinge, que es rockera y tiene otros conceptos, pero siempre está el ingrediente Cristian”.