SAN PEDRO SULA.
Es importante que los padres regulen el tiempo que sus hijos pasan frente a la televisión, videojuegos, computadora y celular.
Mamá y papá deben establecer reglas y limitar en los niños el uso de los dispositivos para que los pequeños puedan cumplir con sus tareas escolares y de la casa, además tener tiempo para jugar.
La licenciada en psicología, Marcela López, dijo que “es importante reconocer que vivimos en un mundo lleno de tecnología, las nuevas generaciones vinieron a un mundo totalmente diferente al de sus padres, por eso es importante saber marcar límites sanos para poder obtener el mayor beneficio de la misma”.
Reglas sobre uso de la televisión. Se debe regular el tiempo para ver la televisión, “los padres y niños deben saber cuándo sí y cuándo no podemos usar la televisión. Las reglas ayudan a no tener que discutir cada día sobre el mismo tema”, comenta.
Se puede poner la regla que durante las comidas no hay televisión o bien, al contrario, que se puede ver un poco mientras se cena, pero no cuando vuelva de la escuela.
1. Controlar el contenido. Esta regla aplica para la televisión, videojuegos y el uso de los teléfonos móviles.
“Los padres deben saber qué programas están consumiendo sus hijos. No todo el contenido supuestamente infantil es adecuado; y es más, para cada edad hay un contenido apropiado. Por tanto, aunque a ellos les guste, es importante que nosotros seleccionemos o evitemos el contenido”, sugiere la experta.
2. Lugar común.
“Tenga en cuenta dónde situará la televisión y la computadora”. “Estas deben estar en lugares comunes y no en el cuarto de los niños”. Tanto si hablamos de la computadora como de la televisión deberíamos monitorear a los menores sin generar una sensación excesiva de control”.
3. Los papás son el ejemplo.
Los padres deben hacer un uso responsable de la tecnología. Tratar de limitar el tiempo de conexión a las redes, móviles, tabletas, entre otros.
“Es complicado enseñar a los hijos a relacionarse de manera responsable con la tecnología si nosotros mismos no lo hacemos”, apunta.
4. Uso conjunto de la tecnología.
“No hay que dejarlos solos (sobre todo a los más pequeños) sino que hay que jugar juntos, hablar y dialogar.
“Si dejamos que usen exclusivamente de manera autónoma la tecnología, estamos perdiendo la oportunidad para aprovechar el potencial de la misma como herramienta lúdico-educativa”, indica.
