11/12/2025
07:12 AM

Vivir en Rosa: Cuatro historias de amor eterno

Hace 50 años estas cuatro parejas sampedranas llegaron al altar para jurarse amor eterno.

Hace 50 años estas cuatro parejas sampedranas llegaron al altar para jurarse amor eterno. La única canción que podría describir perfectamente estas cinco décadas de cada una de estos matrimonios ejemplares sin duda sería “Cómo han pasado los años”.

Vivir en Rosa le rinde tributo a ejemplares esposos que hoy son la estela a seguir de comprensión, unidad, verdadero amor, comunicación y sobre todo de apego a la bendición que Dios les ha regalado: una familia digna. Hoy hablamos de cuatro historias que aunque distintas la una de la otra, tienen algo en común: sus protagonistas contrajeron nupcias en 1960 y en este 2010 celebran sus bodas de oro. Norma y Rafael Saybe, Estela y Ricardo Andonie, Afife y Humberto Larach y Nelly y Antonio Saybe compartieron no sólo anécdotas de su juventud, su noviazgo y sus respectivas bodas, sino también lo que para cada uno significan el amor y el matrimonio.

El encuentro Fue un momento más que grato compartir con estos ilustres matrimonios durante la sesión de fotos durante la cual comprobamos no sólo que el amor jurado hace 50 años sigue vivo, sino que el respeto y la comprensión son prueba de que nacieron el uno para el otro.

En medio de la elegante celebración de las bodas de oro de los esposos Andonie Nicoli, tres parejas más junto a la de anfitriones se unieron para ser retratadas por Vivir en Rosa y contar la historia de su amor exactamente un día antes de que se celebre el Día de San Valentín. No dudaron ni un momento en decir sí a la propuesta de ser contempladas por siempre en esta histórica fotografía que sin duda estará perpetuada en el recuerdo.

Fue Víctor Andrade, de Hollywood Bodas, quien captó a cada una de ellas en medio de la recepción en el Centro Social Hondureño Árabe, donde los protagonistas de las lindas historias eran contemplados por familiares y amigos que los han acompañado durante este tiempo.

No fue una tarea difícil compartir y reunirlos en un momento en el que abundó el gozo y que cada uno aprovechó para recordar cómo hace cinco décadas atrás contrajeron nupcias.

Las charlas

Los cuatro matrimonios revelaron los detalles más significativos de cómo se conocieron, sus respectivos noviazgos, el momento más trascendental de sus vidas, el día de su boda, la llegada de los hijos y nietos, así como las pruebas que la vida les ha puesto para demostrarle al mundo que el amor lo puede todo y que con Dios nada es imposible. Uno los datos curiosos de las cuatro amenas charlas con los matrimonios es que la mayoría de ellos conserva detalles que les fueron obsequiados o utilizaron el día que se casaron.

También recuerdan como si hubiesen ocurrido ayer los momentos inolvidables que disfrutaron en las fiestas familiares con las que celebraron sus enlaces, los atuendos que lucieron, quiénes se los confeccionaron y hasta los destinos de luna de miel que visitaron. Mañana se celebra el Día del amor y por ello Vivir en Rosa rinde un reconocimiento a verdaderos amores eternos.

Norma Ramos y Rafael Saybe

Norma Ramos y Rafael Saybe consolidaron su amor un 21 de mayo de 1960 ante el altar de la catedral San Pedro Apóstol.

Un año antes se conocieron durante la Feria Juniana de 1959, mientras ambos disfrutaban de la rueda de Chicago. “El de él fue amor a primera vista. De mi parte el sentimiento nació poco después de haberlo conocido”, recuerda Norma.

Ese inolvidable día lo celebraron con pocos allegados en la residencia de “Pepín” Álvarez, amigo personal de los jóvenes de ese entonces y, por supuesto, un personaje muy conocido por la sociedad sampedrana de antaño.

Ella vistió un elegante ajuar de impecable color blanco hecho por Elsa Alas.

Viajaron de luna de miel a Miami y luego fijaron su residencia en SPS, donde procrearon cuatro hijos: Dennis, Giselle, Jessica y Rafael. Ellos les han dado la dicha de conocer a 11 nietos; aún no hay bisnietos.

“Nuestra familia es lo más maravilloso que Dios nos ha regalado. Somos muy unidos, nos respetamos, nos apoyamos y estamos el uno para el otro siempre”, dice Rafael.

Como en todo matrimonio, hubo tristezas que gracias a la unidad de ambos y la mano de Dios lograron superar. Una de ellas fue el cáncer de colon que padeció Norma de Saybe hace ocho años.

“Fue uno de los momentos más difíciles porque Dios es el único que sabe el destino de cada persona; Rafael ha sido mi apoyo incondicional y me encantaría volver a casarme con él si volviera a nacer”, confiesa ella.

Rafael, de sobria personalidad, coincide con ella, con quien tiene gran complicidad; ambos adoran los viajes por el mundo.

Antonio Saybe y Nelly Canahuati

Nelly Canahuati y Antonio Jacobo Saybe se unen a este grupo de parejas de oro ejemplares para la sociedad por su impecable matrimonio que justamente el 7 de mayo cumplirá 50 años de haberse celebrado.

Cuando llegaba 1960, Nelly y Antonio se preparaban para festejar su enlace, luego de un bonito noviazgo durante el cual el tiempo que compartieron fue justo para entender que eran el uno para el otro. El tiempo ha pasado y es la mejor prueba de ello.

Celebraron su enlace en familia. Después de su luna de miel por varios días, se establecieron en SPS y fruto de ese amor que los ha mantenido unidos nacieron tres hijos varones: Martín, Gabriel y Jacobo, el gran tesoro de los esposos Saybe Canahuati. Ahora tienen siete nietos.

Él es de carácter jovial, siempre optimista y alegre, mientras que ella es una dama amante del arte, la decoración y los entornos bellos.

Su historia es digna de imitar por la unidad y el gran amor que se han profesado en momentos de dicha o tristeza.

“No celebraremos nuestras bodas de oro con una fiesta porque estaremos mejor en familia, reunidos y disfrutando de cada uno de nuestros miembros”, destacó doña Nelly.

Eso demuestra que los esposos Saybe Canahuati se han mantenido unidos durante todo este tiempo gracias a la gran familia que han formado a base de respeto, cristiandad y comprensión.

Uno de los momentos más tristes que han enfrentado esta digna pareja fue el adiós de su hijo Jacobo. Su fe en Dios, su apego a la vida cristiana y la fortaleza que el Creador les ha enviado en momentos de tristeza y dolor han hecho que Nelly y Antonio vean la vida con optimismo, pensando siempre en que la familia que tienen es su mayor tesoro.

Ricardo Andonie y Estela Nicoli

Ricardo Andonie y Estela Nicoli recién celebraron sus bodas de oro en una inolvidable velada a la que acudieron los más entrañables amigos que hace 50 años conocieron, cuando aún eran dos recién casados.

A mediados de 1954 sus vidas se cruzaron en SPS. Durante seis meses estuvieron conociéndose y duraron cinco años de novios. Se comprometieron en septiembre de 1959 y se casaron el 17 de enero de 1960 en la catedral San Pedro Apóstol.

Después de la boda hubo una cena familiar en la residencia de los padres de la novia. Ese día, ella lució un ajuar confeccionado por las hermanas Pérez. Viajaron de luna de miel a Acapulco, León, Guanajuato y Distrito Federal en México durante un mes. Al retornar establecieron su residencia en Choloma. Ahí vivieron durante 20 años y procrearon dos hijos, Jorge Ricardo y Juan José, quienes les han regalado la dicha de tener dos bellas nueras, Ana Karina Karach y Liliana María Siwady, y seis nietos.

La pérdida de su primera hija fue uno de los momentos más tristes para esta pareja. “Lo superamos por medio de ayuda católica y de nuestra buena relación como esposos”, cuentan.

“Ricardo es dedicado, buen esposo, buen padre y muy responsable en su hogar. Si volviera a nacer, volvería a casarme con él”, afirma Estela.

Él coincide con ella. Mientras bailaban “Cómo han pasado los años” la noche de su celebración de bodas de oro, Ricardo le susurró al oído: “Para mí es una felicidad cumplir 50 años de casados y me encantaría estar juntos toda una vida”. Entre aplausos, revivieron aquel día cuando se juraron amor eterno y aunque los años pasen, seguirán amándose.

Afife Kattán y Humberto Larach

Afife Kattán y Humberto Salomón Larach se conocieron en una fiesta familiar en 1957. Transcurrieron cinco meses en los cuales se conocieron y luego mantuvieron un noviazgo durante dos años. Se casaron el 28 de mayo de 1960 en la capilla del Instituto María Auxiliadora, cuando en ese entonces el recinto católico permitía enlaces. Fue el padre Julián Coll quien los bendijo.

Ese día, la especial dama lució un diseño de la modista Aurora Paz que aún conserva. Después de la misa fue la fiesta entre selectos invitados. “En ese tiempo no había clubes ni salones para celebrar y la recepción fue en la casa de mi padre Henry Kattán”, recuerda ella.

Viajaron de luna de miel a Estados Unidos, México y los países de Centroamérica por 45 días. Hoy, a punto de cumplir sus bodas de oro, Afife y Humberto se sienten orgullosos de su matrimonio. Tienen cuatro hijos: Sandra Emilia, Brenda Soad, Lucía Inés y Javier Humberto.

También cuatro nietos.

“Como en todo matrimonio, siempre hay altos y bajos, pero somos muy felices”. Con estas palabras el matrimonio Larach Kattán afirma sentirse realizado por estas cinco décadas de unidad. Ambos coinciden en que si volvieran a nacer, volverían a casarse. “Él es un padre maravilloso con sus hijos y un excelente esposo”, afirma Afife.

Emocionada, comparte con Vivir en Rosa que “él aún conserva la foto de recién casados en el respaldar de su cama”.

Uno de los momentos más fuertes de todo este tiempo fue cuando en 1997 le diagnosticaron cáncer de piel a esta especial dama. “Lo hemos logrado superar juntos gracias al amor y a la fortaleza que Dios nos da, además, desde hace 13 años pertenecemos al grupo católico Caminos, que nos ha unido más como pareja”, aseguran.