15/06/2025
01:37 PM

'Scorsese es el mejor director de mi época”

Es realmente increíble que a pesar de tres nominaciones al Oscar, con toda la fama del mundo, Leonardo DiCaprio nunca haya ganado semejante premio.

Es realmente increíble que a pesar de tres nominaciones al Oscar, con toda la fama del mundo, Leonardo DiCaprio nunca haya ganado semejante premio. Pero si Martin Scorsese tuvo que esperar hasta una octava nominación para ganarlo, tal vez Leo siga el mismo camino. Después de todo, se volvió una costumbre verlos en la misma ruta del cine, con películas como “Gang of New York”, “The Aviator”, “The Departed”, además de la más nueva película “Shutter Island”, que los vuelve a reunir en el cine, una vez más. Para bien.

Siempre hablamos de los sueños en Hollywood, como una metáfora, pero supongo que a muchas admiradoras tal vez les gustaría saber lo que realmente sueña Leonardo DiCaprio, cuando duerme... . aunque sea una pesadilla.
¿Te animas a contar alguno de tus verdaderos sueños?

Es gracioso, pero yo realmente no tengo... no me acuerdo de mis sueños. Para nada. No los tengo desde hace años, de verdad. Solamente cuando usé un “parche” de nicotina para dejar de fumar... ahí sí tenía pesadillas sangrientas de asesinatos en masa, me levantaba en la mitad de la noche. Tuve que sacármelo. Pero realmente no me acuerdo mucho de los sueños. No sé si significará algo sobre mi, desde algún punto de vista psicológico, pero es la verdad.
Volvamos a la metáfora entonces: ¿Filmar nada menos que cuatro películas con Martin Scorsese es un sueño o una pesadilla? ¿Qué es lo que tanto te gusta de él como director?

Lo que me parece que la gente no entiende sobre (Martin) Scorsese es cuanto confía en los actores que contrata. Esa confianza también hay que ganársela, cada uno tiene que cumplir con su tarea. Hay que entender bien la persona que uno va a interpretar. Aunque él sabe lo que quiere, supongo que navega a través de los actores para encontrar la sabiduría objetiva de los personajes. Es increíble verlo, es un maestro del cine exponiendo la naturaleza humana.

Digamos que no es común ver al mismo director trabajando en tantas películas con el mismo protagonista... Es muy simple: Martin Scorsese, para mí, es el mejor director de mi época. Y él también ya había tenido una relación parecida con otro actor; desde muy temprano en su carrera, había trabajado antes con (Robert) De Niro. Y esa relación que tuvieron logró las películas más memorables y poderosas de la historia del cine.
¿Hay algún pacto especial entre los dos? ¿Cómo es que surgió este vínculo tan especial?

Realmente siempre fueron arreglos individuales. “Gangs of New York” surgió primero, por algo que yo había escuchado hacía tiempo, que Marty estaba tratando de hacer. Y yo siempre había querido trabajar con Martin Scorsese. Por suerte lo logramos. Después, “The Aviator”, yo la había estado preparando por años, con Michael Mann. Y cuando Michael dejó el proyecto para irse con la película de “Alí”, se me ocurrió traer a Martin Scorsese. A él le encantó el género y la historia. Y tuvimos suerte de hacerla. Y para cuando a él le llegó “The Departed”, hubo un personaje para mí y volvió a surgir otro trabajo. Nunca hubo un plan especial. Como la mayoría de las situaciones creativas, todo sucedió naturalmente. Incluso “Shutter Island” también vino de la nada, como un género totalmente único que quisimos hacer.
¿Y así como Martin Scorsese obviamente te admira tanto como actor, cuál de todos los actores con los que trabajaste dirías que admirabas más, cuando recién empezaste tu carrera?

Max Von Sydow. Me acuerdo de sentir la presencia y el poder que tiene este hombre en un estudio del cine, incluso con sólo verlo de espaldas. Yo lo había conocido porque era el actor favorito de mi abuelo. Habíamos ido a un festival de cine en Karlovy Vary, cuando yo tenía 17 o 18 años y él ya era una leyenda. Mi abuelo siempre quiso conocerlo y al final nos sacamos una foto juntos. Todavía la tengo. Y se la mostré a Max, le dije que también era el favorito de mi abuelo y no hace falta decir que nos llevamos muy bien desde entonces. Es un hombre amoroso y como actor, es apasionante.
¿El mejor consejo que recibiste en un estudio de cine?“

El dolor es temporal, el cine es eterno”. Fue lo primero que me dijeron cuando hice una película con Robert De Niro que se llamó “This Boy’s Life”. Eso es lo que me dijo él, porque yo era ese chico salvaje que no sabía comportarse en un estudio de cine. No obedecía ninguna regla. Y cuando llegó el momento de tocar temas serios, él me dijo “Sé que todo esto puede llegar a molestarte ahora y a lo mejor no quieras hacerlo, pero el dolor es temporario y el cine es eterno. Lo que hagas ahora, quedará grabado en un celuloide por miles de años”. Esa clase de mantra me quedó. Cuando los personajes son complejos y tengo que hacer una escena donde simultáneamente hay múltiples niveles, el proceso es fascinante. Y para mí es muy divertido.
¿Qué influye más en tus decisiones? ¿El director de una película, los actores o el rol que te va a tocar?

Nunca hay una decisión consciente que me lleve a gravitar sobre cierto tipo de roles. Lo importante es el guión, una historia que me mueva emocionalmente.
¿Quiere decir que el guión de “Shutter Island” tuvo que ver más en tu decisión que la dirección de Martin Scorsese?

Tener a Martin Scorsese como director, siempre es un bonus. Pero a mí realmente me intrigó el guión y el viaje de esta persona que trata de encontrar la verdad en “Shutter Island”, encontrando también su propia verdad y todos sus traumas del pasado, sus secretos. Me pareció como una vuelta al género de las viejas películas de detectives, como “Vértigo”, “Out of the Past” o “Laura”, películas que Scorsese también nos mostró. A primera vista parece una película de suspenso con ciertas vueltas. Pero a medida que fuimos haciendo la película, emocionalmente se volvió mucho más intensa de lo que todos esperábamos.

Y fue realmente una sorpresa para los dos. Lo que habíamos leído parecía algo que terminó cambiando cuando realmente lo hicimos. Entre todas, creo que ésta es la mejor película que hicimos. Nos sorprendió la profundidad del material porque muchas de estas películas, los thrillers tienen un final sorpresa o ciertos elementos de terror, pero al final del día lo que mejor hace Martin Scorsese es retratar la naturaleza humana, muestra perfectamente cómo es la gente. Y eso es lo que más se destaca, logra que una película de misterio como ésta, sea diferente. Y eso recién lo descubrí cuando ya estábamos filmando la película.

En “Shutter Island” literalmente da miedo ver a Leonardo DiCaprio trabajando con Martin Scorsese. En una película de misterio ambientada en 1954, Leo interpreta al policía Teddy Daniels que tiene que investigar la desaparición de una múltiple asesina que había sido encerrada en el impenetrable instituto mental del Hospital Ashecliffe, en una fortificada “Shutter Island”. Y el suspenso va aumentando a lo largo de la película, con la aceleración de la investigación, por la llegada de un huracán. Y a medida que aumenta la tormenta, se multiplican los misterios y las sospechas, con el miedo de que el personaje de DiCaprio tal vez nunca pueda dejar la isla... con vida.
¿Crees que ésta puede haber sido tu mejor interpretación en cine? ¿Cómo logras la perfección en una película como “Shutter Island”?

Gracias por pensar que tuve una buena interpretación. Y supongo que tanta investigación en el tema me aclaró más el panorama, para mejorar mi trabajo. Obviamente el tema de la película es la enfermedad mental por el instituto que funciona en la isla. Era algo que nos rodeaba todos los días, porque estábamos en una vieja institución mental de verdad. Y también tuvimos a alguien que nos guió a través de la historia de las enfermedades mentales y los terribles tratamientos que solía haber en esa época. Tuve que investigar muchísimo viendo documentales, para saber lo que sufría esta gente y todo lo que tenían que pasar en lugares como el de la película.

La loca historia de “Shutter Island”

La película “Shutter Island” transcurre en una institución psiquiátrica de los años 50, durante una época donde los criminales con problemas mentales eran sometidos a los más violentos procedimientos para probar ciertas teorías contemporáneas sobre la demencia criminal. Pasando por todo tipo de experimentos, fue así como también surgieron las cirugías cerebrales o ciertas drogas neurológicas.

Y más allá de los misterios que dirige Martin Scorsese, la película también muestra el complejo mundo que muy pocos conocen realmente.

Ya existían este estilo de asilos, en la época medieval, cuando se desconocía cómo manejar ciertas demencias en la sociedad. Los institutos europeos del siglo XVI y XVII, justamente fueron los que inspiraron aquéllos que después fueron instalados en Estados Unidos. Eran prisiones literales que nada tenían que ver con centros de tratamientos.. Todo lo contrario, los pacientes eran encadenados y tratados como animales, como la única forma de alejarlos de la sociedad en las peores condiciones, incluso hasta que morían.

El más famoso fue el Hospital Bethlehem de Londres, que abría sus puertas a los visitantes que pagaban apenas un centavo, para instigar a los prisioneros encadenados, sin la menor compasión, sólo para ver cómo reaccionaban.

En contraste, los institutos mentales de Persia contaban con baños relajantes y terapia de música como una temprana forma para tratar que los pacientes pudieran volver a la vida normal.