Con lágrimas de emoción, Jireh Wilson, ganadora de la Gaviota de Plata por la mejor interpretación en el Festival Internacional de Viña del Mar, relató está mañana en Casa Presidencial la emoción que sintió cuando subió al escenario para representar a Honduras.
Expresó que antes de estar en el escenario con sus compañeros les decía que era un honor subir con ellos, porque los admira y respeta mucho el trabajo que desempeñan.
Asimismo, se refirió al trabajo de Cristhian Kaffie y Oswaldo Espinal, quienes le dieron vida a la canción y les hicieron fácil el trabajo, pues ellos sólo vivieron la canción. Confesó que en ese momento sabían que Honduras los estaba viendo en el escenario.
Con la voz entrecortada, Jireh dijo que estaban felices de servir al país, 'es una de las motivaciones más grandes, no sólo somos músicos, somos hondureños y eso es lo que nos mueve, es lo que nos apasiona', agregó Wilson.
