Espectáculos
Los Ángeles, Estados Unidos.
La cantante Ashley Roberts buscó ayuda profesional de terapeutas tras abandonar las Pussycat Dolls y después de que su relación de pareja fracasara.
“Alguna vez he ido a terapia, tengo todo un equipo. Cuando dejé las Dolls y rompí mi relación de cinco años me quedé como: ‘¿Qué es lo que pasa?’. Todo mi pasado salió a la superficie, comencé un viaje. Encontré a una mujer que limpiaba los chakras y que hacía yoga, y comencé a aprender mantras”, cuenta a HELLO!
La cantante Ashley Roberts buscó ayuda profesional de terapeutas tras abandonar las Pussycat Dolls y después de que su relación de pareja fracasara.
“Alguna vez he ido a terapia, tengo todo un equipo. Cuando dejé las Dolls y rompí mi relación de cinco años me quedé como: ‘¿Qué es lo que pasa?’. Todo mi pasado salió a la superficie, comencé un viaje. Encontré a una mujer que limpiaba los chakras y que hacía yoga, y comencé a aprender mantras”, cuenta a HELLO!
Ashley siempre ha sido muy independiente y ha canalizado sus energías en el baile y la canción como una forma de escape cuando sus padres se divorciaron y su hermano Jayce fue diagnosticado con una enfermedad mental.
“Sentía que debía cuidar de mí misma. Mis padres estaban desbordados con todo y estaban centrados en Jayce y en el divorcio. Mi padre además era adicto al alcohol. Por todo, tuve que centrar mi atención en lo que amaba”. Afirmó.
