Los Ángeles, Estados Unidos.
Aunque la fallecida Amy Winehouse fuera apodada en su niñez como Huracán Amy, por su carácter, su madre Janis Winehouse-Collins no sabe si su comportamiento salvaje y honesto pudiera deberse al síndrome de Tourette, caracterizado por múltiples tics físicos y vocales.
“Podría haber sufrido Tourette cuando le daba por gritar cosas. Simplemente no lo sabemos”, cuenta a People.
Janis considera que el talento y la inteligencia de su hija, quien murió en julio de 2011 a los 27 años tras una masiva ingesta de alcohol, le hacían difícil integrarse cuando era pequeña. “Creo que era una niña con necesidades especiales porque era muy inteligente. Tenía mucho talento, vivía en un mundo donde ella no era la norma, donde no encajaba. Pero vivió una gran vida”, añade. Casi cinco meses después de la muerte de Amy apareció un álbum: Lioness: Hidden Treasures.
Aunque la fallecida Amy Winehouse fuera apodada en su niñez como Huracán Amy, por su carácter, su madre Janis Winehouse-Collins no sabe si su comportamiento salvaje y honesto pudiera deberse al síndrome de Tourette, caracterizado por múltiples tics físicos y vocales.
“Podría haber sufrido Tourette cuando le daba por gritar cosas. Simplemente no lo sabemos”, cuenta a People.
Janis considera que el talento y la inteligencia de su hija, quien murió en julio de 2011 a los 27 años tras una masiva ingesta de alcohol, le hacían difícil integrarse cuando era pequeña. “Creo que era una niña con necesidades especiales porque era muy inteligente. Tenía mucho talento, vivía en un mundo donde ella no era la norma, donde no encajaba. Pero vivió una gran vida”, añade. Casi cinco meses después de la muerte de Amy apareció un álbum: Lioness: Hidden Treasures.