Opacada por la bofetada de Will Smith a Chris Rock, la premiación de los Óscar terminó con una victoria histórica: una compañía de streaming ganó la estatuilla a la mejor película.
Si Smith no hubiese agredido a Rock, el triunfo de Apple TV+ con “CODA” habría sido el tema más comentado sobre la ceremonia, dado que eran los grandes estudios los que se llevaban siempre el mayor premio de Hollywood.
“Está claro que los servicios de streaming romperían la barrera, y creo que es algo importante”, dijo Kendall Phillips, un profesor de la Universidad de Syracusse especializado en cultura pop.
“Creo que abrirá el camino para muchas otras películas para que sean tomadas seriamente por los votantes de la Academia”.
Meses antes de la ceremonia en el Teatro Dolby, el crecimiento de las plataformas de streaming y la calidad de sus contenidos eran una de las principales conversaciones de cara a los Óscar de este año.
Los especialistas veían como gran candidata a la producción de Jane Campion, “El poder del perro”, una producción de Netflix que aborda la masculinidad tóxica en el oeste de Estados Unidos en los años 1920.
El western protagonizado por Benedict Cumberbatch en el papel de un vaquero sexualmente reprimido había sido fuertemente promovido por la gigante del streaming que buscaba el sello de aprobación de Hollywood.
Pero “CODA” creció como la espuma y las audiencias se enternecieron con un elenco amoroso y con su mensaje de esperanza a través de las adversidades enfrentadas por una familia sorda.
Presencia constante
Las plataformas de streaming irrumpieron en los principales premios de Hollywood en 2017 cuando “Manchester junto al mar”, protagonizada por Casey Affleck y Michelle Williams, fue nominada a mejor película.
Fue derrotada por “Luz de luna” en la ceremonia en la cual “La La Land” fue incorrectamente anunciada como ganadora.
Desde entonces, Netflix se ha convertido en una presencia constante en la categoría más importante de los Óscar, con producciones como “Roma”, “El irlandés”, “Historia de un matrimonio”, “Mank,” “El juicio de los 7 de Chicago” y “No miren arriba”.
Durante los últimos siete años, Netflix ha conquistado más nominaciones que cualquier otra distribuidora. Solo este año totalizó 27, pero apenas ganó una: la de mejor director para Campion.
En contraste, Apple TV+ recibió su primera nominación al Óscar el año pasado y este año ganó tres de las seis categorías que disputaba.
La publicación especializada Variety dijo que Apple invirtió más de 10 millones de dólares en su campaña al Óscar, casi lo mismo que costó filmar “CODA”.
Netflix no se quedó atrás y gastó bastante en su apuesta para coronarse con la estatuilla dorada: Los Ángeles estuvo durante meses empapelada con carteles de la película. Pero para algunos especialistas era mucho para digerir.
“A dondequiera que ibas en Los Ángeles veías una valla diciendo que era ‘La mejor película del año’”, dijo un director bajo anonimato a Indiewire. “Si alguien tiene la culpa es la propia Netflix por presionar tanto con esta película”.
Familia Medici moderna
Hubo también quejas extraoficiales de algunos miembros de la Academia que sentían que no podían votar por una película de streaming debido a cierto rechazo generalizado hacia ese formato.
Muchos cineastas lamentan la solitaria experiencia de ver producciones en una pequeña pantalla en casa, y hablan con nostalgia de la experiencia de una sala junto a otros amantes del cine.
Esta nostalgia quedó registrada con el discurso de Kevin Costner, uno de los más elocuentes de la noche, al anunciar el Óscar al mejor director.
“Hace un tiempo yo también fui un niño, en ese castillo mágico de la historia y de la narrativa, mi asiento estaba en la oscuridad parpadeante de la imaginación”, dijo.
Pero las audiencias últimamente privilegian el contenido, opina el profesor Phillips, y las plataformas de difusión cumplen el objetivo.
“Es muy difícil determinar de dónde viene una película, si es de una producción de streaming o de un gran estudio. Esas líneas probablemente estarán difusas para siempre”, dijo.
El público que acudió a ver “CODA” en el cine no está interesado en saber quién la hizo, opinó.
“Esa frontera, donde de un lado está la experiencia del cine y del otro lado es la experiencia de transmisión en el hogar, creo que probablemente nunca se restablecerá, al menos a como era, durante muchas décadas”, agregó.
Los propios cineastas están cada vez menos preocupados por esto.
“Netflix no es lo que yo hubiera querido históricamente, pero es un poco como los Medicis de nuestra época”, dijo Campion a Los Ángeles Times el año pasado, refiriéndose a la influyente familia que patrocinó a artistas del Renacimiento.