La forma como enfrenta la crisis económica se ha vuelto el principal medidor de eficiencia y aprobación para los presidentes.
Y no tener ni siquiera Presupuesto General de la República y muchos menos un plan, acuerdos o líneas de crédito internacionales para sortear la contracción internacional han hecho que el presidente José Manuel Zelaya sea uno de los peor evaluados por la firma mexicana Consulta Mitofsky.
Así lo revela el estudio publicado por AméricaEconomía.com, que en cambio sitúa a los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Colombia, Álvaro Uribe; y de México, Felipe Calderón, en los primeros lugares con popularidades cercanas al 70%.
Junto a Zelaya, en el fondo de la tabla están Alan García, de Perú, y Cristina Fernández, de Argentina.
'El manejo de la imagen presidencial sigue siendo clave en los índices de popularidad en los mandatarios de la región', dice Carlos Penna Charolet, director de mercadotecnia de Consulta Mitofsky quien agregó que 'la habilidad de los mandatarios para destacar o minimizar el manejo de la crisis económica es una de las variables que explica el movimiento en la lista de mandatarios evaluados'.
Los líderes
Lula y Uribe siguen al tope. Ambos mandatarios destacan con una 'evaluación sobresaliente', un 70% y 69%, respectivamente. Lula -primero en la tabla- se mantiene con el mismo nivel de popularidad que registró en la encuesta en enero de este año, gracias a que sus esfuerzos han apuntado a destacar el manejo de crisis de su Gobierno. Medidas concretas en el sector financiero, inversión en infraestructura y vivienda son las acciones más destacadas de Lula en el último tiempo en Brasil.
En el caso colombiano, Álvaro Uribe -segundo- bajó un punto porcentual respecto de la evaluación anterior. Sin embargo, destaca por la gran cantidad de tiempo en que ha gozado de altos índices de popularidad. El combate a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Farc, ha sido el elemento determinante en la permanencia al tope de la región, a casi un año de la emblemática liberación de Ingrid Betancourt y los posteriores golpes a la guerrilla.
México es quizás uno de los países de la región más golpeado por la crisis, debido a su cercanía con Estados Unidos, pero el presidente Felipe Calderón -tercero- alcanzó un 68% de popularidad -seis puntos porcentuales más que en la encuesta anterior-. La estrategia de Calderón ha sido apuntar a otro tema: la compleja situación de violencia en la frontera debido al narcotráfico. Acciones concretas para capturar a los capos de la droga y que ha sumado el esfuerzo del Gobierno de Estados Unidos ha sido premiado por la ciudadanía.
Saca el mejor de CA
El presidente salvadoreño, Antonio Saca, -cuarto- registra uno de los incrementos más importantes: alcanza un 66% de popularidad, un alza de 10 puntos porcentuales respecto de la encuesta anterior. Según Penna, eso se explica por el manejo que tuvo en el tema de transparencia. El Salvador vivió recientemente una campaña presidencial, donde destacó la transparencia del proceso, lo que elevó la imagen positiva del mandatario. La paradoja está en que en las recientes elecciones fueron ganadas por el opositor Mauricio Funes, terminando con casi 20 años de dominio del Partido Arena en el poder.
Lo anterior hace surgir una interesante tesis: los altos índices de popularidad no aseguran un triunfo en las elecciones.
La encuesta posiciona al presidente de Costa Rica, Óscar Arias en el lugar 11 con el 49%; Martín Torrijos, de Panamá en la ubicación 12 con un 48%; Álvaro Colom, de Guatemala en el puesto 13 con el 45%. Para el experto el factor común entre todos estos mandatarios es que no han podido superar la línea de la pobreza, por lo tanto, mientras no se vean resultados concretos en ese aspecto no habrán mejoras sustanciales en los índices de popularidad.
Al dicho grupo de países se agregan Leonel Fernández, de República Dominicana, con un 38%; Daniel Ortega, de Nicaragua con el mismo porcentaje, ocupando el puesto número 14; y Manuel Zelaya, de Honduras en el último lugar con un 25% y cuya evaluación se hizo en octubre de 2008.
En la cola
Al igual que en la encuesta anterior la lista es cerrada por Alan García, de Perú; Cristina Fernández, de Argentina. En ambos países sudamericanos el elemento en común es que los problemas de política interna han sobrepasado la conducción gubernamental, señala Penna. A juicio del experto, la popularidad de García está condicionada por los problemas de corrupción. A pesar de que el mandatario ha puesto énfasis en el manejo de crisis y el crecimiento económico, mientras no haya efectos concretos en el tema de la corrupción, no habrá un incremento en la popularidad del mandatario peruano.
Lo mismo en el caso argentino. La administración de Cristina Fernández sigue en deuda y lejos de solucionar problemasv internos éstos se han agudizado, dice Penna.
- Barak Obama, presidente de EUA, -quinto- goza de un 61% de popularidad a su ingreso en la tabla. En las próximas ediciones se registrará su comportamiento en la tabla.
- MICHELLE Bachelet -octava- que registra un fuerte incremento en el índice de aprobación llegando al 59%, un alza de 13 puntos porcentuales.
- ECUADOR es otro de los países que está en plena campaña, pero en este caso 'las críticas opositoras sí están dañando la imagen de Rafael Correa -sexto-,