Con el propósito de desarrollar más de siete mil hectáreas de palma africana en el litoral atlántico, el ministro de la Secretaría de Agricultura y Ganadería, SAG, Héctor Hernández, firmó un convenio de cooperación técnica con la empresa Tropicrop de Malasia.
El proyecto tendrá un costo de 11 millones de dólares, de los cuales siete millones provienen del Banco Centroamericano de Integración Económica, Bcie, y los cuatro millones restantes serán aportados por los productores y el gobierno hondureño.
Objetivo
El propósito del proyecto es generar fuentes de empleo sostenible e impulsar la economía de las zonas beneficiadas, ya que se destinará para la producción de biodiésel.
Además beneficiará a unos 720 productores de palma africana de los departamentos de Cortés, Yoro, Atlántida y Colón.
Tropicrop fue la empresa que de entre tres compañías malayas, convocadas por la SAG, presentó la oferta más baja para desarrollar este proyecto, indicó Hernández.
Primera etapa
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Palma de Honduras, Fenapalmah, Eduardo Cole, dijo que este proyecto constituye la primera etapa de un programa de 28 mil hectáreas que ellos pretenden desarrollar de la mano con la SAG y con semilla de la variedad Yangambi, proveniente de Malasia, misma que será entregada por el gobierno malayo a partir de enero de 2007.
El ministro Hernández, al referirse al tema, dijo que la semilla será recibida en lotes de 100 mil unidades mensuales para asegurar un mejor control y distribución de la misma.
Se estableció que los viveros estarán en el Bajo Aguán, departamento de Colón, en San Francisco, Atlántida y en Guaymas, El Negrito, Yoro.
Víctor Iscoa, director de la cadena de la palma, manifestó que la firma de este convenio marca un evento histórico para el país, ya que Honduras se convierte en el primer país en adquirir semilla de la variedad Yangambi.
Explicó que esta variedad es protegida por el gobierno de Malasia por ser considerada en ese país como patrimonio nacional y a su vez es el mayor productor de aceite de palma en el mundo.
Actualmente Malasia cuenta aproximadamente con tres millones y medio de hectáreas de palma africana, del cual el 90 por ciento proviene de esta variedad de semilla.
Iscoa agregó que incorporar esta nueva variedad en la industria palmera beneficiará la economía del país, ya que al darle el manejo adecuado a las plantaciones se obtendrá mayor rentabilidad en el rubro.
Biodiésel
El biodiésel es un combustible amigable con el ambiente, se elabora a partir de aceites vegetales, que pueden obtenerse de cualquier planta oleaginosa.
El gobierno y el sector privado trabajan en un plan para producir combustibles alternativos como el etanol y el biodiésel para garantizar la seguridad energética ante el incremento constante de la factura petrolera que este año cerrará en 1,100 millones de dólares.
