'Me he comportado como un idiota'. Así de rotundo contestaba Jürgen Klopp, entrenador del Borussia Dortmund, cuando en zona mixta era preguntado por su comportamiento tras el primer gol del Napoli obra del argentino Gonzalo Higuaín.
El visceral desenlace que puede visualizarse en el vídeo, vino precedido por una acción fortuita que apartaba momentáneamente del partido al central del Borussia, Neven Subotic, por un corte en la ceja del que no dejaba de brotar sangre.
Tras ser atendido por el cuerpo médico del equipo teutón, el futbolista espera una autorización del colegiado para volver a entrar que, sin embargo, no llegaba al considerar que la herida no estaba cerrada del todo. A partir de aquí, la fatalidad y el acierto de Higuaín quisieron jugar una mala pasada al actual subcampeón de la Champions League.
Con Subotic aguantando en la banda, el Napoli botó un córner que acabaría con un cabezazo inapelable del 'Pipita' dando lugar al particular show del excéntrico técnico, cuyo 'cara a cara' con el cuarto árbitro terminó por costarle la expulsión. Y es que fuera de sus casillas, aún tuvo tiempo de ver como el portugués Pedro Proença se acercaba a la banda para señalarle el camino de los vestuarios.
Disculpas al término del encuentro
Una vez finalizada la contienda Klopp explicaba a los periodistas lo que pasó, 'el incidente comenzó antes del saque de esquina, Subotic estaba listo, pero el árbitro no le dejó entrar porque tenía un poco sangre en la parte delantera. Me puse nervioso y acusé al cuarto árbitro de no ver lo que pasaba'.
En un noble gesto el entrenador reconocía su error públicamente, 'es mi culpa, quise pedirle disculpas después del partido. Me dejé llevar por la atmósfera del juego y la emoción del momento; a veces, en esas circunstancias, damos lo peor de nosotros'.