El partido entre las selecciones de Holanda y México en el estadio Castelão de Fortaleza estuvo rodeado de polémica, como varios encuentros de este Mundial de Brasil 2014.
Primero, los mexicanos reclamaron una falta dentro del área sobre Héctor Herrera cuando el defensa holandés Ron Vlaar levantó muy alto la pierna para despejar el balón, pero su pie impactó en el rostro del jugador azteca.
Pero la jugada más controversial fue sobre Arjen Robben y para todos es un penal claro. Antes de irse al descanso, Holanda contragolpeó con Robin Van Persie, le dio el pase al mediapunta del Bayern Múnich, que parecía quedar solo ante Guillermo Ochoa, sin embargo, para mal del holandés, aparecieron dos mexicanos.
Primero fue Rafael Márquez y luego Héctor Moreno. Ambos tocaron al holandés en dos momentos distintos y en ambas jugadas fue penal. Lamentablemente para la selección de Louis van Gaal, el árbitro portugués Pedro Proenca estuvo lejos de la jugada y de lejos el línea tampoco vio la jugada tan clara en el área de Ochoa.
Los holandeses reclamaron con justa razón. Tras el golpe, Moreno salió lesionado y se confirmó a Diego Reyes en su reemplazo.
Otra acción en la que se dio polémica fue en el minuto 67. Robben, con la marca de dos jugadores aztecas, entró al área y fue derribado, pero el árbitro no volvió a pitar nada.
Sobre el tiempo de descuento, Proenca sí pitó falta penal en el área mexicana cuando Robben recibió una clara falta del capitán Rafa Márquez. Huntelaar se encargó de transformar la acción en gol y dio el triunfo a Holanda 2-1 y la clasificación a cuartos de final. México, por su parte, a preparar las maletas para regresar a casa.