Luis Fernando Suárez, técnico de la Selección Nacional de Honduras, se reservó el derecho y les cerró las puertas a los medios de comunicación durante el entrenamiento de este martes en el Lockhart Stadium de Miami.
El timonel catracho comenzó a trabajar con el plantel completo y ha preferido hacerlo guardando la estrategia, sobre todo ante los ojos espías del rival: Costa Rica.
Contra el reloj, el representativo hondureño ha debido disminuir la carga física, a pesar de que Carlos Gutiérrez, el responsable de esa parte, se encargará de pulir algunos detalles antes del viaje a San José el miércoles por la noche.
El combinado catracho ha enfatizado, como es lógico a más de tres días del choque, en los trabajos tácticos y en el volumen de juego.
El ensayo a solas le permitió al estratega colombiano trabajar con tranquilidad e incluso se presume que ha servido para despejar dudas sobre qué piezas colocará en el tablero contra los ticos.
Lo único que hasta el momento está asegurado dentro del esquema de Suárez es la dupla de Osman Chávez y Víctor Bernárdez en la zona central de la defensa. El resto todavía se mantiene como especulación.
Se da por seguro el retorno de Wilson Palacios, quien figuró entre lo más rescatable en la derrota 0-2 contra Israel en el choque de preparación, que ha trastornado el panorama de la Bicolor, en cuyo medio campo Luis Garrido y Roger Espinoza han sido titulares indiscutibles en la eliminatoria.
También el nombre de los laterales es causa de debate, ya que tanto Emilio Izaguirre como Juan Carlos García son candidatos para adueñarse del lateral izquierdo. Arnold Peralta, Brayan Beckeles y Wilson Palacios figuran entre las opciones del colombiano para salir por la banda derecha.
¿Tiene Suárez su once? Se presume que el técnico cafetero llegará a San José con el equipo definido tras el último ensayo en Fort Lauderdale.