Hace cuatro años para estos días estaba a punto de coronarse campeón con la selección de su país natal, Brasil, en el Mundial de Corea y Japón 2002. Ahora Luis Felipe Scolari o “Felipao” tiene soñando a todos los portugueses, ayer le ganó a Irán y sumó seis puntos, suficientes para el acceso matemático a octavos, ya que a falta de un partido con México cuenta con tres puntos, Angola uno y la selección asiática cero.
“Es un triunfo histórico porque, por primera vez en 40 años, Portugal accede a octavos de final”, dijo Scolari.
La referencia que menciona Scolari es el Mundial de Inglaterra de 1966, si bien el torneo tenía otro sistema de clasificación, ya que los dos primeros de los cuatro grupos pasaron a cuartos de final.
Era la primera Copa del Mundo en la que participaba Portugal y asombró con una actuación que brindó grandes remontadas, goles espléndidos de su gran estrella, Eusebio, la “pantera negra” y un inesperado tercer puesto, su mejor clasificación en la historia.
Portugal quedó primera de sus grupo, con tres victorias, eliminó en cuartos a Corea del Norte por 5-3, perdió con la futura campeona Inglaterra por 2-1 y obtuvo el tercer puesto al derrotar a la entonces Unión Soviética por 2-1. Dos partidos marcaron el primer mundial de Portugal: la victoria por 3-1 sobre Brasil, con polémica por la lesión de Pelé, y la de Corea del Norte.
Contra los coreanos, Eusebio ofreció un recital y levantó el partido para Portugal. Sorprendentemente, Corea se puso por delante con tres goles a cero en menos de media hora. Pero a los 28 minutos, Eusebio anotó el primero de sus cuatro goles y acabó con las ilusiones coreanas.
Portugal no volvió a un Mundial hasta México 1986, donde hizo las maletas tras la fase de grupos, mala suerte que repitió en 2002, donde la llamada “generación de oro”, con Couto, Figo y Rui Costa como mosqueteros, frustró las expectativas de la afición lusa.