El cubano Angel Matos fue descalificado en su pelea por una de las preseas de bronce de la categoría de más de 80 kg de taekwondo masculino de los Juegos Olímpicos de Pekín-2008 por agredir al árbitro Chakir Chelbat. Por tal reacción, la Federación Internacional de Taekwondo lo suspendió de por vida a él y a su entrenador, Leudis González.
El taekwondoísta cubano, campeón olímpico en Sydney 2000, le pegó una patada al reféri sueco Chakir Chelbat al ser descalificado en la pelea por el bronce con el kazajo Arman Chilmanov.
El incidente opacó el triunfo de su rival, el kazajo Arman Chilmanov.
Matos iba ganando 3-2 en el segundo round, cuando cayó al tatami tras recibir un contacto de su rival. Permaneció unos segundos ahí esperando recibir atención en uno de sus pies cuando el juez central declaró terminado el combate.
El cubano reclamó molesto la decisión y sin pensarlo le dio una patada en el rostro al juez antes de ser detenido por su entrenador.
“Nos robaron, nos robaron.... Todo estaba arreglado, los kazajos les ofrecieron dinero (a los jueces)”, dijo Leudis Gónzalez, entrenador de Matos al final del combate.
Matos, monarca de este peso en Sidney 2000, buscaba recuperar la gloria perdida luego de terminar undécimo en Atenas 2004.
Las autoridades del taekwondo anunciaron que tanto Matos como González quedan fuera de por vida de la disciplina.