El día que Iniesta pudo ser jugador del Real Madrid

Madrid, España.

Andrés Iniesta se ha convertido por derecho propio en uno de los grandes mitos de la historia del fútbol español. Su gol en la final del Mundial de Sudáfrica 2010 que dio el título a España, le convirtió en el futbolista mas aplaudido de la Liga, pero al margen de sus éxitos con la Selección, resulta muy difícil pensar el machego sin hacerlo al mismo tiempo en el Fútbol Club Barcelona, el club en el que ha jugado mas de 500 partidos oficiales.

Y sin embargo, el futbolista manchego estuvo muy cerca de fichar por el eterno rival en mas de una ocasión. De hecho, siendo niño ya era aficionado del Real Madrid y con doce años pudo pasar a formar parte de la cantera madridista, después de haber demostrado su talento en el Torneo Alevín de Brunete jugando en el Albacete. Allí no tuvo reparo en declarar amor eterno al club merengue: “Yo era del Real Madrid a todo poder”.

Pero también el Barça se había fijado en él y sus padres consideraron que el entorno de La Masía sería más adecuado para el desarrollo -no sólo futbolístico- del chaval, que en septiembre de 1996 pasó a formar parte de la cantera del club catalán. Apenas seis años después, al inicio de la temporada 2002-03 y de la mano de Louis Van Gaal, Andrés Iniesta debutaba en el primer equipo del Barça, en un partido de Champions League ante el Brujas.

Foto: La Prensa Andrés Iniesta se ha convertido en pieza fundamental en el Barcelona.

Durante esa campaña y la siguiente, ya con el también neerlandés Frank Rijkaard en el banquillo culé, el joven futbolista alternó el filial con el primer equipo, disputando un total de 26 partidos (la mayoría, como suplente) entre Liga, Copa y Champions League. Con Rijkaard, Iniesta se estableció definitivamente como miembro de la primera plantilla en la temporada 2004-05, disfrutando de minutos en casi todos los partidos, aunque saliendo habitualmente desde el banquillo.

En la siguiente campaña, Iniesta disputa 33 partidos de Liga y 11 de Champions League, y el Barça consigue además del título nacional, el de campeón de Europa (el segundo en la historia culé) al derrotar al Arsenal en la final de París. Partido en el que el albaceteño había saltado al campo cuando su equipo perdía por uno a cero, colaborando en la remontada azulgrana. Pero Andrés está convencido de que puede dar mas de sí, y ante la dificultad para hacerse un hueco en un centro del campo poblado por jugadores del talento de Deco, Xavi o Ronaldinho, se plantea salir del club.

Es el verano de 2006 y el Real Madrid celebra elecciones a la presidencia (el 2 de julio) después de que Florentino Pérez haya puesto fin a su primera etapa en el club presentando su dimisión unos meses antes. Entre los habituales fichajes electoralistas de los candidatos, uno de ellos, Juan Palacios, decide contactar con Andrés Iniesta, que a través de su padre se compromete con él para firmar por el Real Madrid si consigue llegar a la presidencia del mismo.

Sin querer confirmar los hechos, José Antonio Camacho, también comprometido con la candidatura de Palacios, anuncia en una entrevista con la Cadena Ser que tuvo lugar la víspera de las elecciones haber llegado a un acuerdo con “un centrocampista español muy bueno”.

Ese centrocampista no era otro que el jugador del Barça, tal como confirmó el propio Juan Palacios al día siguiente, tras depositar su voto en las urnas del Bernabeu: “Camacho ha hecho gestiones para fichar a Andrés Iniesta, jugador del Barcelona, para nuestro equipo. Creo que es una buena noticia para todos los madridistas”.

Sin embargo el vencedor de las elecciones no será Juan Palacios, sino Ramón Calderón gracias a la anulación judicial del voto por correo por ‘la falta del mínimo control’, porque según se pudo saber después, de no haberse producido esta anulación, Juan Palacios habría conseguido la victoria.

Iniesta nunca llegará al Real Madrid, aunque el diario Marca volverá a relacionarle con el club merengue un año después, publicando incluso una portada con el titular “Figo, Saviola y ahora… Iniesta” y aseverando que el Madrid estaba dispuesto a pagar su cláusula de rescisión, información que fue rápidamente desmentida.

Ramón Calderón, por su parte, no cumplió con sus promesas electorales (Cesc, Robben y sobre todo, Kaká) pero si que firmó los fichajes de Cannavaro, Van Nistelrooy, Emerson, Diarrá o Reyes, y a Fabio Capello como entrenador.

Con ellos, el Madrid conseguiría romper una sequía de tres temporadas sin títulos, pero la presidencia del palentino estaría siempre marcada por la polémica. El 16 de enero de 2009 se vería obligado a dimitir después de que se le relacionase con la manipulación de una asamblea de socios celebrada unas semanas antes, regresando Florentino Pérez al cargo al finalizar la temporada. De la carrera de Iniesta en el Barça, poco se puede decir que no se haya dicho ya, pero nos queda la duda de saber qué se diría si su futuro hubiera estado ligado finalmente con otro equipo, el Real Madrid.