Luego están los que no paran de hablar, los que no han descubierto la riqueza del silencio ni la belleza de la contemplación; olvidan todo lo que se aprende cuando se cultiva el hábito de escuchar.
Estudios han descubierto que realizar multitareas puede acelerar nuestro corazón, elevar nuestra presión arterial, provocar ansiedad y mermar nuestro estado de ánimo.