El director estrenará la secuela de su clásico el mes que viene y cree que la trama de la nueva película ha allanado el camino para otra entrega de la franquicia más adelante.
La película tiene la atmósfera ‘sucia’ y oscura, pero familiar, de los ambientes más ochenteros del Ridley Scott de ‘Black Rain’ (1989) o ‘Blade Runner’ (1982).