24/11/2025
01:01 PM

BMW i8: El deportivo del futuro

  • 14 noviembre 2014 /



Con la innovadora arquitectura LifeDrive, materiales innovadores, como el carbono, diseño de capas y numerosas medidas inteligentes

El BMW i8 está listo para revolucionar su categoría, ya que se trata del primer deportivo con el consumo y las emisiones de un vehículo compacto.

La fortaleza de este híbrido enchufable (plug-in) reside, entre otros factores, en la sincronización perfecta del motor eléctrico y el motor de combustión, lo que se hace evidente en la extraordinaria eficiencia y dinamismo en carretera.

Placer de conducir progresista

Progreso en movimiento: un vehículo que fascina. Con la innovadora arquitectura LifeDrive, materiales innovadores, como el carbono, diseño de capas y numerosas medidas inteligentes.

Todos los grandes logros pioneros tienen su propia historia. En el caso del BMW i8, se inicia con el lanzamiento en 2008 del Proyecto i y el ambicioso objetivo de reinventar la movilidad urbana.

Apenas un año más tarde, el concepto de BMW Visión EfficientDynamics dio a conocer lo que un líder tecnológico orientado plenamente hacia el ahorro de energía puede alcanzar.

Esta fue la base que dio origen al BMW Concept i8, que demostró en un prototipo prácticamente listo para la producción hacia dónde se orientaba el desarrollo.

Láser azul para sus luces

Para darle vida a sus nuevas luces. Estas se convertirían en las más poderosas y con menos consumo de todo el mercado.

Con el fin de mejorar la seguridad de sus autos BMW anuncia el uso de nueva tecnología para las luces. Utilización de láser azul para faros más potentes y seguros se podrían ver en el nuevo i8.

Los expertos aseguran que las nuevas luces de BMW alcanzarían los 5.500 y 6.000 grados Kelvin. Gracias a esto tendríamos a uno de los faros más luminosos de todo el mercado en la actualidad.

Para conseguir utilizar esta tecnología en autos comerciales los ingenieros alemanes debieron trabajar horas extras. Como resultado se obtuvo un sistema de lentes que al combinarse tienden a descomponer la luz y así evitar que el láser sea ofensivo para el exterior.

La nueva luz no solo es potente, sino también eficiente. Los diodos utilizados consumen un tercio de energía de lo que los LED y tienen capacidad para reflejar suficiente brillo incluso a velocidades superiores a los 120 kilómetros por hora.