¿Sabes mantener sanos tus riñones?

Este 12 de marzo se conmemora el Día Mundial del Riñón, una buena razón para tocar el tema hoy en Amiga.

  • Actualizado: 12 mar 2015

Redacción.

En los últimos años en nuestro país se ha incrementado el número de personas que padecen de alguna enfermedad en los riñones, lo que nos recuerda la importancia de mantener este órgano saludable.
La función principal del aparato excretor es eliminar las toxinas del organismo contenidas en la sangre y expulsar, mediante la orina, las sustancias que deben desecharse y que no son aprovechadas por el organismo.
Para lograr la salud y el buen funcionamiento de los riñones, la alimentación juega un papel muy importante.
De acuerdo con las recomendaciones de la nutrióloga, Fernanda Zimmermann, es importante:

1. Seguir un plan de alimentación equilibrado en cuanto a los porcentajes de los nutrimentos. Muchas personas pueden pensar que consumir una gran cantidad de proteína o evitar por completo las grasas puede ser benéfico a la salud, y no es así. Lo ideal es mantener el equilibrio en la ingesta de los diferentes grupos de alimentos. Lo indicado para adultos sanos es que el aporte de energía diario provenga de: 60% de carbohidratos, 15% de proteína y 25% de lípidos.

2. Consumir de forma moderada la sal de mesa y alimentos ricos en sodio. Se ha comprobado que dietas bajas en sodio promueven la salud del órgano en pacientes con enfermedad renal.

A continuación se presentan algunas recomendaciones para moderar el consumo de sodio en tu alimentación:

* El ajo, el vinagre y el limón pueden sustituir parte de la sal utilizada en la preparación de los alimentos. Para potencializar el sabor de los alimentos se pueden utilizar especias como el ajo, azafrán, canela, clavo y pimienta; y hierbas aromáticas como la albahaca, anís, eneldo, cola de caballo, laurel, menta, orégano, ortiga, perejil, romero, tomillo y vainilla.

* Alimentos que deben ser consumidos con moderación por personas que padecen alguna enfermedad en los riñones por su elevado contenido en sodio son: carnes y pescados salados y ahumados, alimentos embutidos (jamón, salami, salchicha), tocino, patés, preparados precocidos y congelados basados en carne (nuggets, canelones, empandas), mariscos, quesos madurados, margarina y mantequilla con sal, conservas, extractos, salsas preparadas.

* Elegir alimentos con menos fósforo. Esto ayuda a proteger tus huesos y los vasos sanguíneos, por lo que te sugerimos moderar el consumo de este mineral contenido, por ejemplo, en carnes rojas y refrescos de color oscuro.

* No te automediques. Como los riñones son los encargados de eliminar por la orina los desechos del metabolismo tanto de alimentos como de medicamentos, si la persona consume fármacos que no deberían, puede originar una sobrecarga a los riñones perjudicándolos.

Recomendaciones alimentarias
En presencia de algún otro padecimiento que pudiera afectar el desempeño de los riñones, como hipertensión, diabetes o dislipidemias, hay que tenerlos de forma muy controlada y seguir las indicaciones del médico. Tomar en cuenta también si existe necesidad o restricción especial de alguna vitamina o mineral.
Alimentos óptimos para riñones saludables: frutas y verduras frescas, sobre todo las que tienen alto contenido de antioxidantes y agua, para fomentar la desintoxicación de los riñones, como la sandía, manzana, melón, fresa, pera, uva, alcachofa, berenjena, espinacas y espárrago son alimentos que favorecen la salud del aparato urinario.
Otros ejemplos son: cereales de maíz y arroz, tortilla, pan, harinas y pastas, carnes magras sin grasa visible, pescado blanco fresco, lácteos frescos y bajos en grasa, avellana, postres caseros sin sal o bajos en sal.

Consecuencias
Cuando el riñón se daña repercute fuertemente en el individuo, así como en su familia. Por lo tanto, es de vital importancia llevar a cabo medidas preventivas manteniendo el buen funcionamiento de este órgano.
Desde el punto de vista nutricio, las enfermedades renales se pueden prevenir en algunos casos.
Recuerda que una alimentación correcta junto con una buena hidratación son puntos claves para ayudar a mantener los riñones saludables.