Una buena nutrición y una dieta balanceada ayudan a que los niños crezcan saludables. No importa si su hijo es un niño pequeño o un adolescente, usted puede tomar las medidas necesarias para mejorar su nutrición y formar buenos hábitos alimenticios. Las cinco mejores estrategias son éstas:
1. Establecer un horario regular para las comidas en familia.
2. Servir una variedad de alimentos y refrigerios saludables.
3. Darle un buen ejemplo siguiendo una dieta nutritiva.
4. Evitar las peleas por la comida.
5. Involucrar a los niños en el proceso.
Comer en familia es una costumbre agradable. A los niños les agrada la previsibilidad de las comidas en familia, y los padres tienen la oportunidad de ponerse al día con sus hijos. Los niños que participan en comidas en familia con regularidad presentan estas características: comen frutas, vegetales y cereales, es menos probable que coman refrigerios poco saludables y a futuro no usarán marihuana ni alcohol.
Es posible que los adolescentes no se entusiasmen con la idea de comer en familia porque están tratando de establecer su independencia. Sin embargo, estudios han demostrado que los adolescentes todavía desean los consejos y la opinión de sus padres a la hora de la comida en familia.
Cualquier momento en que la familia se reúna para comer es bueno; ya sean alimentos traídos de un restaurante o una cena completa preparada en casa.
