Hay una nueva actualización del megapopular Pokémon Go y las buenas noticias es que al parecer corrige algunas fallas que complican el disfrute del juego.
Las malas noticas es que quita una de las funciones clave ya que elimina las huellas que permiten al usuario saber cuándo hay un pokemon cerca, lo que cierra un ciclo de dos semanas durante el cual dicha función no respondía como debiera.
Cuando un pokemon se encuentra lejos, este sistema de rastreo mostraba tres pequeñas huellas y a medida que te acercabas a la criatura, las huellas iban desapareciendo hasta que el pokemon aparecía en el mapa. Así es como debería funcionar en un mundo ideal.
Sin embargo, durante las últimas dos semanas, la función sigue mostrando las tres huellas, sin importar que tan lejos o cerca se esté de los monstruitos.
Aunque Niantic, el desarrollador del juego dice estar enterada del problema todavía no lo ha resuelto ni se sabe cuándo lo hará.
Así que al quitar la función, eliminan el problema pero no lo resuelve, al menos por ahora. Se rumora que Niantic quitó la función a propósito para aliviar la presión sobre sus servidores, los que parecen no darse abasto ante la enorme popularidad del juego.
 Las huellas permitían, en teoría, que los jugadores rastreasen pokemones cercanos.
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Por otra parte, la actualización sí supuso algunas mejoras, como por ejemplo un botón de “Transferir” mejor posicionado, por lo que ya no hay que delizar tanto la pantalla para cambiar un pokemon por algo e caramelo.
También se han cambiado las ubicaciones de ciertos pokemones y también la cantidad de daño que ciertos ataques provocan.
