San Pedro Sula, Honduras.
Cuatro meses tendrán que esperar los parientes de los dos hermanitos que murieron calcinados para que les entreguen los cadáveres en la morgue de Medicina Forense.
Astor Efraín Paz, padre de los infortunados niños David (2) y Axel Josue Paz (4), dijo ayer que las autoridades forenses le informaron que para entregarle los cuerpos tienen que hacerles las pruebas de ADN a los fallecidos.
Los dos pequeños murieron el martes a las 10:00 am en la aldea El Marañón de Villanueva, Cortés, al quemarse su vivienda.
Paz indicó que los resultados de esa prueba tardan ese tiempo, mismo que tendrían que esperar para que les sean entregados los cuerpos.
El padre de los infortunados hermanitos le hizo un llamado a las autoridades forenses para ver si pueden agilizar la entrega y así darles sepultura.
En el incidente resultó quemada la otra hija de Ástor Paz, Ástrid Nicole Paz (6), una menor con retos especiales, quien según lo informado por él está grave de salud. Paz manifestó que las causas del incendio fue un cortocircuito que se produjo cuando su esposa andaba en la pulpería.
“Aquí en la morgue lo que me dijeron es que hay que esperar y que esa espera puede ser de cuatro meses por las pruebas de ADN, pero yo lo que más quiero es que me ayuden a que los entreguen luego para irlos a enterrar como se debe”, manifestó. Paz agregó que lo que más necesita es darle sepultura a sus niños porque tiene a su otra hija grave en el hospital y “tengo que ver por ella porque mi mujer está descontrolada y también tengo que estar auxiliándola”.
Calificó como una injusticia la tardanza de la entrega de los cuerpos de sus hijos, ya que “uno es pobre y no tenemos recursos para estar gastando, yo quisiera que hoy mismo me los entregaran para enterrarlos y seguir con mi hija Ástrid, que es la que más me está necesitando ahorita”.
Indicó que el otro año iban a poner al kínder al niño de cuatro años.
“Mis planes eran apoyarlos a ellos hasta donde yo pudiera y construirles su casa para que cuando yo muriera tuvieran donde vivir”, expresó Paz, quien explicó que la vivienda donde estaban no es de ellos, sino que les daban donde vivir porque él estaba cuidándola.
Aseveró que está descartado que alguien le haya metido fuego a la casa porque fue un cortocircuito lo que provocó el incendio.
Cuatro meses tendrán que esperar los parientes de los dos hermanitos que murieron calcinados para que les entreguen los cadáveres en la morgue de Medicina Forense.
Astor Efraín Paz, padre de los infortunados niños David (2) y Axel Josue Paz (4), dijo ayer que las autoridades forenses le informaron que para entregarle los cuerpos tienen que hacerles las pruebas de ADN a los fallecidos.
Los dos pequeños murieron el martes a las 10:00 am en la aldea El Marañón de Villanueva, Cortés, al quemarse su vivienda.
Paz indicó que los resultados de esa prueba tardan ese tiempo, mismo que tendrían que esperar para que les sean entregados los cuerpos.
El padre de los infortunados hermanitos le hizo un llamado a las autoridades forenses para ver si pueden agilizar la entrega y así darles sepultura.
En el incidente resultó quemada la otra hija de Ástor Paz, Ástrid Nicole Paz (6), una menor con retos especiales, quien según lo informado por él está grave de salud. Paz manifestó que las causas del incendio fue un cortocircuito que se produjo cuando su esposa andaba en la pulpería.
“Aquí en la morgue lo que me dijeron es que hay que esperar y que esa espera puede ser de cuatro meses por las pruebas de ADN, pero yo lo que más quiero es que me ayuden a que los entreguen luego para irlos a enterrar como se debe”, manifestó. Paz agregó que lo que más necesita es darle sepultura a sus niños porque tiene a su otra hija grave en el hospital y “tengo que ver por ella porque mi mujer está descontrolada y también tengo que estar auxiliándola”.
Calificó como una injusticia la tardanza de la entrega de los cuerpos de sus hijos, ya que “uno es pobre y no tenemos recursos para estar gastando, yo quisiera que hoy mismo me los entregaran para enterrarlos y seguir con mi hija Ástrid, que es la que más me está necesitando ahorita”.
Indicó que el otro año iban a poner al kínder al niño de cuatro años.
“Mis planes eran apoyarlos a ellos hasta donde yo pudiera y construirles su casa para que cuando yo muriera tuvieran donde vivir”, expresó Paz, quien explicó que la vivienda donde estaban no es de ellos, sino que les daban donde vivir porque él estaba cuidándola.
Aseveró que está descartado que alguien le haya metido fuego a la casa porque fue un cortocircuito lo que provocó el incendio.