Las investigaciones del robo en el almacén de evidencias del Ministerio Público no han avanzado.
Hasta ayer a las nueve de la mañana se reunió el personal de la Fiscalía con los auditores que vinieron de Tegucigalpa y empezaron a hacer el inventario físico, informó el coordinador regional del Ministerio Público, Rafael Fletes.
Una fiscal y los empleados de la Fiscalía contra la Corrupción, responsables directos de manejar el almacén de evidencias y los cinco auditores que vinieron de Tegucigalpa conforman el equipo que Fletes ha designado para investigar los pormenores del robo.
Del almacén se robaron muchas pruebas de todos los casos que maneja la Fiscalía; es un duro golpe contra la administración de justicia, según el jefe regional del Ministerio Público.
Fletes afirmó que todos los involucrados en la seguridad interna del edificio y el personal encargado de la administración del almacén, que tienen acceso diario a éste, son sospechosos, en principio, del robo.
La sustracción de evidencias, según él, ha ocasionado enorme daño al proceso judicial porque son las pruebas que se constituyen en la columna vertebral de todo proceso de investigación que culmina con fallo y sentencia en los tribunales.
Después del inventario se corroborará con la base de datos computarizados qué fue sustraído y qué no se llevaron los ladrones.
Robo de armas
Por el momento sólo se sabe que todos los objetos de valor, como dinero, joyas y armas de grueso calibre, susceptibles de comercializarse, fueron escogidos en primer lugar por los malvivientes.
Un caso de portación ilegal de armas, cuyos presuntos autores gozaban de medidas cautelares, se quedó sin evidencias porque las 21 armas de ese caso fueron robadas por los malhechores.
El informe preliminar urgete que ha solicitado Fletes es precisamente el de los casos específicos que serán afectados por el robo de las evidencias para subsanar en lo posible el daño.
Para evitar más sorpresas desagradables, se ha protegido la zona donde está ubicado el almacén.
Todos los empleados que entren y salgan de la escena del robo serán registrados.
Los jefes han decidido asignar un espacio emergente para guardar evidencias nuevas porque el trabajo diario de los fiscales no será interrumpido.
El coordinador de fiscales dijo que lamenta la lentitud de la Dnic en las pesquisas que le corresponden, incluso de oficio, en el caso.
Acudirá al viceministro
Dijo que le pedirá al viceministro de Seguridad, Mario Perdomo, que instruya puntualmente a la Policía de Investigación para que haga lo que le corresponde.
Por el momento no han sido suspendidos de sus funciones los empleados de la seguridad interna y del almacén.
Ayer fue entrevistada la jefa del almacén por la Policía de Investigación.
El portavoz de la Dnic, Erick Peñalba, dijo que esperan el informe del inventario de la Fiscalía para proceder a la investigación.
- Siete guardias de seguridad trabajan las 24 horas en la vigilancia de la Fiscalía dentro del inmueble.
- 20 millones de lempiras sólo en equipo electrónico ha invertido el Ministerio Público en la regional de San Pedro Sula.