Tegucigalpa, Honduras.
La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito describe en su Manual de lucha contra el secuestro la existencia de nueve tipo de secuestros.
Aunque al consultarle a la Policía Nacional, indica que en el país solo hay secuestro con fines de extorsión; la realidad indica que ha habido denuncias de secuestro, seguidas de asesinatos de opositores políticos.
La Policía constantemente habla de rapto de supuestos delincuentes con posteriores ajustes de cuentas; durante el secuestro y asesinato de un menor de edad se habló de venganza; asimismo hay trata con fines de explotación sexual y autosecuestro, que la ONU califica como simulado.
La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito describe en su Manual de lucha contra el secuestro la existencia de nueve tipo de secuestros.
Aunque al consultarle a la Policía Nacional, indica que en el país solo hay secuestro con fines de extorsión; la realidad indica que ha habido denuncias de secuestro, seguidas de asesinatos de opositores políticos.
La Policía constantemente habla de rapto de supuestos delincuentes con posteriores ajustes de cuentas; durante el secuestro y asesinato de un menor de edad se habló de venganza; asimismo hay trata con fines de explotación sexual y autosecuestro, que la ONU califica como simulado.
Según las estadísticas policiales, en tres años, de 2011 a 2013, hubo 147 secuestros y 131 detenciones, revela un documento obtenido a través de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública.
Estadísticas del Centro Electrónico de Documentación e Información Judicial (Cedij). De ese total, el Poder Judicial resolvió solo 118 de estos ingresos. Los jueces dictaron 12 sentencias condenatorias, 59 autos de apertura a juicio, 15 sobreseimientos definitivos, 29 sobreseimientos provisionales y hubo una conciliación.
Conozca las modalidades
1. Secuestro con fines de extorsión, para exigir una suma de dinero, influir en decisiones empresariales u obtener una ventaja comercial.
2. Con fines políticos o ideológicos, cuyo objetivo puede ser destacar una reivindicación particular, crear una atmósfera de inseguridad (o reforzarla), obtener publicidad o influir en decisiones de gobiernos u otras entidades.
3. Entre grupos delictivos, o dentro de ellos, con el fin de cobrar deudas u obtener ventajas en un mercado delictivo particular o con fines de intimidación.
4. Secuestro vinculado a disputas familiares o domésticas, que en algunas jurisdicciones se conoce como “rapto”.
5. Explotación sexual, que puede incluir el contrabando posterior de las mujeres y los niños a través de las fronteras nacionales.
6. Secuestro en el curso de otras actividades delictivas, normalmente para facilitar la adquisición de determinados productos, generalmente en el curso de un robo.
7. El secuestro simulado o fraudulento, en que la “víctima” actúa conjuntamente con otros o sola para obtener algún beneficio material o de otro tipo.
8. El “expreso”, en que la víctima es secuestrada durante un período corto pero suficiente para obtener alguna concesión o ganancia financiera.
9. El “secuestro virtual”, en que inicialmente no hay ningún secuestro pero se exige un pago con el pretexto de que una persona (a menudo un pariente) ha sido secuestrado.
