Este miércoles 28 de agosto, las autoridades hondureñas encontraron dos vehículos sumergidos en el río Ulúa, en el mismo lugar donde un día antes fue hallada una camioneta perteneciente a Mario Bernal Chávez, uno de los diez hombres desaparecidos el pasado 9 de junio en Baracoa, Cortés.
El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, confirmó el hallazgo y aseguró que las operaciones de búsqueda en la zona no han cesado desde la desaparición de estas personas, ocurrida hace más de dos meses.
“El día de ayer se localizó un vehículo en el río Ulúa, el cual se extrajo ayer mismo, y hoy hemos encontrado dos vehículos más de los cinco que suponemos están relacionados con la desaparición de estas personas en esta área,” explicó Sánchez.
Hasta ahora, se han recuperado tres de los cinco vehículos que las autoridades creen están vinculados con el caso. El proceso de extracción ha sido complicado debido a la fuerte corriente del río y la acumulación de sedimento en los automóviles, que han estado sumergidos por un largo tiempo. A pesar de estas dificultades, los equipos de buzos y rescatistas continúan trabajando para recuperar los dos vehículos restantes.
El ministro Sánchez indicó que las investigaciones preliminares sugieren que los vehículos “fueron arrojados intencionalmente” al río. “Queda pendiente la localización de otros dos vehículos que creemos se utilizaron para el desplazamiento de los desaparecidos,” añadió.
Por su parte, César Rodríguez, director de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) en la zona norte, informó que una vez extraídos, los vehículos serán trasladados a una zona segura para realizar una inspección exhaustiva.
Las autoridades creen que este caso está relacionado con una disputa territorial entre grupos criminales, lo que ha intensificado la atención sobre las investigaciones en curso.
