Que se investigue y se castigue a los responsables con todo el peso de la ley, pidieron ayer los miembros de la Mesa de Seguridad Comunitaria de Limón, Colón, luego que se conociera que pobladores del sector incendiaron la posta policial de ese municipio.
La acción es en represalia por la captura de Erasmo Ávila Palacios (de 47 años), alias El Monstruo, pedido en extradición por Estados Unidos acusado de tráfico de drogas. Según ellos, “Erasmo es un excelente ser humano y un hombre muy dadivoso con la comunidad”.
El siniestro se registró alrededor de las 9:00 pm del miércoles. Las personas aprovecharon que los policías andaban en patrullaje y el edificio estaba cerrado. Rociaron con gasolina las instalaciones y luego le prendieron fuego. Cuando regresaron, las llamas comenzaban a cubrir el local, el cual se quemó en un 80%.
“Trae las llaves que están en la patrulla para abrir la puerta, saquemos las cosas, las mochilas”, se logra escuchar por parte de los policías en un video que se grabó cuando llegaron los uniformados. Los policías denunciaron que fueron objeto de amenazas de muerte por parte de desconocidos.
Tras el siniestro, autoridades civiles, policiales y militares y de la sociedad civil se reunieron de emergencia en Limón para tomar acciones para evaluar la situación y tomar medidas.
“Lamentamos el suceso y rechazamos categóricamente todo acto que atente contra la seguridad y bienestar de la población”, pidieron los miembros de la Mesa de Seguridad Comunitaria de Limón.
“Se desplazó a Limón un fuerte contingente policial y militar para que los agentes realicen los trabajos de investigación y obtener elementos que puedan esclarecer quiénes le metieron fuego a la posta”, dijo Ángel Herrera, portavoz policial en Colón.
En prisión
Ayer, un juez de primera instancia de extradición dictó ayer detención provisional a Erasmo Ávila, luego de celebrada la audiencia de información en la causa que se le sigue por tráfico de drogas.
En la cita judicial se le informó a Ávila Palacios sobre los cargos que le imputan y los derechos que se le otorgan para poder defenderse. El 28 de septiembre es la segunda audiencia.
Según indagaciones de las autoridades, Erasmo Ávila Palacios, de la etnia garífuna, es el que quedó a cargo del clan Montes Bobadilla para el tráfico de drogas.
Los informes establecen que Erasmo Ávila operaba vía marítima desde Colón, teniendo a Limón como centro de operaciones.
