La Fiscalía presentó este miércoles un requerimiento fiscal en contra de los tres jóvenes capturados ayer de forma infraganti cuando acababan de raptar a un joven al que pretendían asesinar en una cuartería de San Pedro Sula, zona norte de Honduras.
El juez, después de analizar los requerimientos y de conocer el testimonio de la víctima, decidió enviar a los acusados a un centro penal a la espera de que se realice la próxima audiencia.
Los imputados son Manuel Orlando Bonilla, Jorge Javier Murillo y Cristian Isaac Alvarenga, alias Demonio de tasmania.
'El juez una vez que analizó los extremos, presentados por el Ministerio Público, determinó remitir a los tres al Centro Penal de San Pedro Sula una vez que se evacuó el testimonio de la víctima', dijo Elvis Guzmán, vocero del Ministerio Público en San Pedro Sula.
Los supuestos descuartizadores fueron sorprendidos ayer por la Policía a eso de las 5:30 pm en una cuartería de la colonia Villa Ernestina.
Miguel Baltodano, jefe policial en el sector, manifestó ayer que recibieron la denuncia al 911 de una persona que había sido privada de libertad, por lo que de inmediato desplazaron varias patrullas y lograron dar con la ubicación de los supuestos mareros, quienes en el interior de un cuarto tenían a un joven listo para ser asesinado.
Los supuestos delincuentes que querían quitarle la vida registraron la vivienda.
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La persona fue raptada de un bus de la ruta 7 cuando viajaba a la colonia Villa Ernestina para visitar a una joven, quien se supone lo entregó a los mareros.
La persona liberada relató a LA PRENSA: “Me golpearon y aquí se puede ver la sangre, ellos me decían que me iban a acuchillar y a tirar mi cadáver embolsado, yo no le debo nada a nadie y jamás pensé que me iba a ocurrir esto”.
El joven liberado que por seguridad omitió su nombre, tiene 20 años de edad y relató que era estudiante del instituto José Trinidad Reyes, pero dejó el colegio porque tenía malas calificaciones.