Juan Diego Mejía Alarcón (50), empleado de la catedral San Pedro Apóstol acusado del delito de extorsión, seguirá recluido en el Centro Penal Sampedrano, luego de que el juez le dictara auto de formal prisión en la audiencia inicial.
Mejía Alarcón fue detenido la tarde del pasado sábado en un centro comercial sampedrano después de que supuestamente recibiera una cantidad de dinero de una menor de 14 años a la que presuntamente amenazaba y acosaba sexualmente, según consta en la denuncia interpuesta por la madre de la afectada.
El Ministerio Público presentó acusación contra el imputado por acoso sexual y extorsión.
Agentes de la Fuerza Especial Antiextorsión que participaron en la detención del empleado de catedral informaron que se organizó una entrega en el centro comercial donde el sospechoso había citado a la menor y allí lo capturaron.
La denuncia
La menor, en su declaración ante el juez que conoció la primera instancia del proceso penal, dijo que Mejía Alarcón la acosaba y amenazaba con matar a su madre y secuestrarla si no lo llamaba por teléfono varias veces al día. Además le exigía dinero a cambio de no acosarla. La madre de la menor fue quien supuestamente descubrió la situación e interpuso la denuncia ante las autoridades.
En su defensa, Mejía Alarcón dijo que su único error fue hacerse amigode la menor, pero que en ningún momento la acosó y la extorsionó.
El empleado de la catedral aceptó que había citado a la menor, pero no brindó detalles sobre cuál era el objetivo de la reunión y añadió que le había solicitado un préstamo de 500 lempiras a la jovencita.
Dentro de 60 días será la audiencia preliminar en la que sabrá si la causa se eleva a juicio oral y público o se le aplica otra medida.