El Progreso, Honduras.
Cuando estaban jugando naipes, un grupo de cuatro hombres fueron asesinados a balazos por dos sujetos que les disparan a quemarropa.
El hecho ocurrió la tarde de ayer en el barrio El Pénjamo, donde otras dos personas resultaron heridas, por lo que fueron trasladados de emergencia a un hospital cercano.
Entre los fallecidos están los hermanos Ramón Ernesto Mejía Ulloa y Marcos Oswaldo Mejía Ulloa (43), quienes trabajaban como albañiles y en la medición de terrenos.
Las otras dos víctimas son Carlos Alfredo Galeas Puerto (27) y José Gerardo Reconco Aguilar (22), este último había intentado llegar a Estados Unidos, pero lo deportaron; sus familiares afirmaron que su sueño era vivir en el país del norte para trabajar y ayudar a sus parientes. La madre de Reconco manifestó que el año pasado su hijo egresó de la carrera de Bachillerato en Finanzas.
Autoridades policiales dijeron que el hecho fue cometido por dos sujetos que llegaron en motocicletas y dispararon contra el grupo de hombres; después de cometer la masacre escaparon.
Al lugar llegaron varios equipos de Tigres, quienes se desplazaron por la zona en la búsqueda de los hechores.
Familiares de las víctimas manifestaron que los asesinos asaltaron a las víctimas; pero según la Policía, el motivo podría ser otro, ya que los cuatro hombres fueron obligados a tirarse boca abajo al suelo y fue ahí cuando los asesinaron.
Pobladores de la zona que llegaron a la escena de crimen no dieron información de los asesinados por temor a represalias.
Agentes de la unidad de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) levantaron decenas de casquillos de diferentes calibres.
Cuando estaban jugando naipes, un grupo de cuatro hombres fueron asesinados a balazos por dos sujetos que les disparan a quemarropa.
El hecho ocurrió la tarde de ayer en el barrio El Pénjamo, donde otras dos personas resultaron heridas, por lo que fueron trasladados de emergencia a un hospital cercano.
Entre los fallecidos están los hermanos Ramón Ernesto Mejía Ulloa y Marcos Oswaldo Mejía Ulloa (43), quienes trabajaban como albañiles y en la medición de terrenos.
Las otras dos víctimas son Carlos Alfredo Galeas Puerto (27) y José Gerardo Reconco Aguilar (22), este último había intentado llegar a Estados Unidos, pero lo deportaron; sus familiares afirmaron que su sueño era vivir en el país del norte para trabajar y ayudar a sus parientes. La madre de Reconco manifestó que el año pasado su hijo egresó de la carrera de Bachillerato en Finanzas.
Autoridades policiales dijeron que el hecho fue cometido por dos sujetos que llegaron en motocicletas y dispararon contra el grupo de hombres; después de cometer la masacre escaparon.
A la escena del crimen en el barrio El Pénjamo, de El Progreso, llegaron varios equipos de las Policías Preventiva y Militar, Tigres y de la DPI.
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Familiares de las víctimas manifestaron que los asesinos asaltaron a las víctimas; pero según la Policía, el motivo podría ser otro, ya que los cuatro hombres fueron obligados a tirarse boca abajo al suelo y fue ahí cuando los asesinaron.
Pobladores de la zona que llegaron a la escena de crimen no dieron información de los asesinados por temor a represalias.
Agentes de la unidad de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) levantaron decenas de casquillos de diferentes calibres.