29/04/2024
06:13 AM

Conductor y ayudante son procesados por tragedia en Copán

Wilfredo Baca Carrasco y Jorge Alberto Chavarría Padilla enfrentan cargos por homicidio imprudente grave, conducción temeraria y lesiones imprudentes

San Juan de Opoa, Copán

La Fiscalía de Delitos Comunes logró el auto de formal procesamiento en contra de Jorge Alberto Chavarría y Wilfredo Baca Carrasco, conductor y ayudante del bus que provocó la tragedia en la que murieron 17 personas en San Juan de Opoa, Copán.

Ambos enfrentan cargos por homicidio imprudente grave, conducción temeraria y lesiones imprudentes, en relación con el mencionado accidente de tránsito.

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En vista de la gravedad de los delitos imputados y el número de víctimas involucradas, se ha impuesto la medida de prisión preventiva para los acusados.

Wilfredo Baca Carrasco de 29 años y quien en realidad era el ayudante del pesado auto, había resultado herido en el fatal accidente del miércoles 28 de febrero. Desde esa fecha había estado hospitalizado y el martes fue dado de alta y luego fue trasladado a la cárcel de Santa Rosa de Copán.

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El fatídico día, Jorge Alberto Chavarría Padilla dijo que su ayudante tomó la unidad “cuando veníamos por Cucuyagua”.

Al momento del accidente, en la unidad grande solo venían tres personas: Wilfredo Baca Carrasco, quien manejaba la unidad, una pasajera extranjera identificada como Patricia Chicaiza, de origen sudamericano y José Alberto Chavarría Padilla, quien fue detenido el día del accidente.

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La tragedia ocurrió a eso de las 6:30 am del miércoles 28 de febrero. El bus con placas HAL 8616 recorría la ruta Lepaera - Santa Rosa y a la altura de la aldea La Montañita, en San Juan de Opoa, chocó frontalmente con la unidad que procedía de Ocotepeque, el cual, según testimonios, le quitó el derecho de vía en una curva.

“El chofer se puso a descansar y el bus lo manejó el ayudante. Le pregunté si él (ayudante) sabía manejar y me respondió que sí, que estaba aprendiendo”, contó la sobreviviente.

“Le advertí que era peligroso y yo temía por mi vida”, contó entre sollozos. Solo iban ellos tres .“El ayudante perdió pista en la pendiente y el señor del bus le gritó que controlara el volante, pero no pudo, y en vez de frenar aceleró”, contó Chicaiza.