Yoro, Honduras.
Tres hombres acusados del delito de parricidio fueron enviados a la prisión por el juzgado de Letras de Yoro, en la zona norte de Honduras.
Herlín Martínez, padre del bebé, es acusado por parricidio, además de su hermano Edwin Martínez y Juan Urbina, quien es padrasto de los dos hombres.
El violento crimen ocurrió el pasado sábado 11 de junio cuando el menor se encontraba en la casa de su abuela, quien vive en compañía de su pareja Juan Urbina, y sus dos hijos Edwin y Herlín.
Según se conoció, el bebé estaba enfermo y no paraba de llorar, situación que molestó a los hombres al grado de que él en compañía de su hermano y su padrasto comenzaron a golpear a la criatura.
Los golpes fueron múltiples, uno a uno se propinaron una golpiza a punto de puñetazos y patadas, lo que provocó que el menor fuera internado de emergencia.
Aunque los médicos trataron de salvarle la vida al menor, su estado de salud empeoró hasta el punto de morir.
Los hombres fueron denunciados por su propia madre, quien a la hora de esta terrible tragedia, no se encontraba en el lugar.
Tres hombres acusados del delito de parricidio fueron enviados a la prisión por el juzgado de Letras de Yoro, en la zona norte de Honduras.
Herlín Martínez, padre del bebé, es acusado por parricidio, además de su hermano Edwin Martínez y Juan Urbina, quien es padrasto de los dos hombres.
El violento crimen ocurrió el pasado sábado 11 de junio cuando el menor se encontraba en la casa de su abuela, quien vive en compañía de su pareja Juan Urbina, y sus dos hijos Edwin y Herlín.
Según se conoció, el bebé estaba enfermo y no paraba de llorar, situación que molestó a los hombres al grado de que él en compañía de su hermano y su padrasto comenzaron a golpear a la criatura.
Los golpes fueron múltiples, uno a uno se propinaron una golpiza a punto de puñetazos y patadas, lo que provocó que el menor fuera internado de emergencia.
Aunque los médicos trataron de salvarle la vida al menor, su estado de salud empeoró hasta el punto de morir.
Los hombres fueron denunciados por su propia madre, quien a la hora de esta terrible tragedia, no se encontraba en el lugar.