Tegucigalpa. La criminalidad ha sobrepasado los límites y ni las autoridades se salvan de las manos de los asesinos.
A la lista de víctimas mortales se suman autoridades departamentales como alcaldes, vicealcaldes y aspirantes a cargos de elección popular, que perdieron la vida sin que hasta la fecha la Policía conozca los móviles de los crímenes.
De enero a la fecha se ha registrado la muerte violenta de dos alcaldes, dos vicealcaldes y un regidor, así como un candidato a alcalde y otro a diputado suplente, entre otros, en distintos hechos ocurridos a escala nacional.
Entre octubre y noviembre del año pasado también se suscitaron hechos de violencia contra candidatos a cargo de elección popular y sus familiares en municipios del norte de Olancho y en otras ciudades.
El primer crimen en contra de autoridades departamentales fue el 19 de enero, cuando murió Wenrys Edelis Hernández Escoto, alcalde de Esquías, Comayagua, quien con su padre y dos personas más cayeron abatidos a balazos en un campo de fútbol.
El asesinato más reciente ocurrió el pasado martes en La Masica, Atlántida, donde fue acribillado el vicealcalde Marcos Leverón Peña (55) en su hacienda.
