24/04/2024
07:19 AM

Teresa de Pastor, protectora del patrimonio nacional

Es una dama apasionada por el arte en todas sus manifestaciones y su labor la ha convertido en un icono cultural de nuestro país

SAN PEDRO SULA. El 27 de enero el Museo de Antropología e Historia celebra su 29 aniversario y el personaje ilustre detrás de su legado es Teresa Campos de Pastor, cuyo aporte a la cultura nacional es digno de exaltar. María Teresa de María Campos Castelló nació en la Ciudad de México el 25 de mayo de 1945.

Sus padres, Mauricio de María y Campos y Teresa Castelló Yturbide, ambos conocedores y entusiastas de la cultura azteca. De ellos, heredó esa cercanía del alma con el arte en sus complejas dimensiones. Su madre, narradora, escritora, investigadora y promotora cultural, ilustradora y recopiladora de relatos mexicanos populares, utilizó el pseudónimo de Pascuala Corona, quien construyó un legado que sigue intacto en su país.

Vida. En 1975 contrajo nupcias con el hondureño Rodolfo Pastor Fasquelle, un destacado historiador, analista político, periodista y poeta. Con él, procreó tres hijos: Camila, Rodolfo y Jerónimo, quienes cambiaron positivamente su vida. “Lo más valioso que he logrado en la vida son mis tres hijos y mis siete nietos. Inesperadamente, el Museo de Antropología e Historia de San Pedro Sula resultó ser un tierno más. Doña Daisy Fasquelle me invitó a formar parte del grupo que se encargaría de organizarlo. Participar desde los inicios fue un gran privilegio. Con entusiasmo me dediqué a diseñar la distribución de los diferentes espacios, el mobiliario y la museografía. Había que acondicionar la escuela Francisco Morazán para transformarla en museo”, expresó Campos.

Tres años les tomó restaurar el edificio, Teresa fue la encargada principal de esa enorme tarea. De la colección, la mayoría de piezas fueron donadas por Daisy Fasquelle, Henry Fransen y Armando Bonilla.

El recinto cuenta con piezas únicas e históricas de nuestro país.

Investigaciones. Veintinueve años después de su inauguración, el museo continúa siendo un lugar insigne en la ciudad, donde estudiantes y extranjeros llegan para empaparse más de nuestra historia. Teresita, como se le conoce de cariño, hizo sus estudios académicos en diferentes países, en México culminó sus pregrados en antropología con especialidad en etnología y artes plásticas con especialidad en escultura; además de estudios de idiomas como el inglés, francés, italiano y ruso.

En cuanto a sus trabajos, ha realizado una gran cantidad desde 1964 sobre docencia, investigaciones, voluntariados, esculturas y conferencias en EUA, México y Honduras. Por ejemplo, en 1969 estuvo tres meses en la Sierra Tarahumara realizando una investigación sobre la vida cotidiana de la mujer indígena.En 1972, fungió como voluntaria para el obispo de Santa Rosa de Copán haciendo entrevistas para una investigación sobre la religiosidad de los campesinos del occidente de Honduras; ya en 1976 elaboró el busto de don Pedro Bosch Gimpera, que se encuentra en los jardines de la Unam en la capital de México. Entre 1988 y 1989 dictó conferencias sobre medicina tradicional y alimentación campesina en México y Estados Unidos (Universidad de Filadelfia, Haverford College y en la Biblioteca Pública de Nueva York).

De los más recientes, en 2004 participó en un intercambio con el Museo Banneker Douglas de Annapolis, en EUA, organizado por el IPAM (International Partnership Among Museums) que depende de la Asociación Americana de Museos (AAM). Y la lista se volvería interminable para la ejemplar dama, pero uno de los aportes que la capital industrial siempre tiene presente es su contribución en el espacio público artístico más importante que se ubica en el corazón de la ciudad, el Museo de Antropología e Historia de San Pedro Sula. Este fue fundado el 27 de enero de 1994.

Desde su inauguración hasta el momento, el museo ha venido cumpliendo sus metas, entre ellas las de proteger el patrimonio nacional, educar y divulgar la cultura, fomentar la investigación, crear y reforzar una identidad cultural. “Desde que me nombraron directora, un cargo que no esperaba, pero que acepté con todos sus retos, conformamos un equipo que hemos logrado consolidar, dirigir y mantenerlo activo durante casi 29 años. Ha sido un trabajo duro, que ha implicado mucho estudio, dedicación y esfuerzo. Sin embargo, investigar la historia del valle de Sula; rescatar y exhibir cientos de objetos que estaban escondidos en cajas y bodegas; ver a tantas personas conocerlo y disfrutarlo, ha sido, sin duda, muy gratificante. Estoy segura que siempre habrá quienes lo aprecien y le den continuidad”, dijo.

" “El arte significa libertad. Por eso hay que enseñarle a todo niño, desde pequeño, a expresarse de la manera que más lo emocione” "

Personalidad. La primera impresión al conocerla es muy gratificante, su humildad, disposición a servir y su simpática forma de ser hacen conjunto con su vestimenta, la cual se caracteriza por ser bordados de diferentes culturas precolombinas de la región, demostrando así su inconmensurable amor por las culturas que conviven en América.

Su cabello largo envuelto en una trenza que le llega hasta la cintura; de ojos azules que convergen con su piel blanca y su pasión al hablar sobre cualquier tema son parte de sus características naturales. El arte y Teresita son tal para cual, cuan Minerva, diosa romana protectora de las artes, su inefable trayectoria es la prueba más verídica de su éxito, su amor por el arte no conoce de discrepancias.

De los más recientes, en 2004 participó en un intercambio con el Museo Banneker Douglas de Annapolis, en EUA, organizado por el IPAM (International Partnership Among Museums) que depende de la Asociación Americana de Museos (AAM). Y la lista se volvería interminable para la ejemplar dama, pero uno de los aportes que la capital industrial siempre tiene presente es su contribución en el espacio público artístico más importante que se ubica en el corazón de la ciudad, el Museo de Antropología e Historia de San Pedro Sula. Este fue fundado el 27 de enero de 1994.

Desde su inauguración hasta el momento, el museo ha venido cumpliendo sus metas, entre ellas las de proteger el patrimonio nacional, educar y divulgar la cultura, fomentar la investigación, crear y reforzar una identidad cultural. “Desde que me nombraron directora, un cargo que no esperaba, pero que acepté con todos sus retos, conformamos un equipo que hemos logrado consolidar, dirigir y mantenerlo activo durante casi 29 años. Ha sido un trabajo duro, que ha implicado mucho estudio, dedicación y esfuerzo. Sin embargo, investigar la historia del valle de Sula; rescatar y exhibir cientos de objetos que estaban escondidos en cajas y bodegas; ver a tantas personas conocerlo y disfrutarlo, ha sido, sin duda, muy gratificante. Estoy segura que siempre habrá quienes lo aprecien y le den continuidad”, dijo.

Personalidad. La primera impresión al conocerla es muy gratificante, su humildad, disposición a servir y su simpática forma de ser hacen conjunto con su vestimenta, la cual se caracteriza por ser bordados de diferentes culturas precolombinas de la región, demostrando así su inconmensurable amor por las culturas que conviven en América.

Su cabello largo envuelto en una trenza que le llega hasta la cintura; de ojos azules que convergen con su piel blanca y su pasión al hablar sobre cualquier tema son parte de sus características naturales. El arte y Teresita son tal para cual, cuan Minerva, diosa romana protectora de las artes, su inefable trayectoria es la prueba más verídica de su éxito, su amor por el arte no conoce de discrepancias.