Si no hay ayuda financiera de las grandes empresas para la construcción de la biblioteca en la nueva Plaza de la Cultura, más de 360 mil niños perderían la oportunidad de tener un espacio tan importante para su formación en San Pedro Sula.
La directiva del Club Rotario de San Pedro Sula ha anunciado que la escasez de recursos económicos para finalizar la obra podría ser un impedimento para que la primera etapa de la Plaza de la Cultura finalice en los 18 meses que estaban contemplados.
Con los 7 millones de lempiras que los rotarios han logrado recaudar con el apoyo de unas 11 empresas, el proyecto ha avanzado satisfactoriamente en cuanto a la cimentación, demolición y reforzamiento de la infraestructura. Sin embargo, el presupuesto es de 30 millones de lempiras, lo que significa que no cuentan ni con la mitad de la inversión.
César Elvir, director del proyecto de la Plaza de la Cultura, informó que hasta la fecha han invertido dos millones y medio en los trabajos requeridos para la construcción de la biblioteca. También, por medio de actividades han reunido más de un millón que están siendo sumados a este ambicioso proyecto. “Este proyecto va dirigido a la gente pobre que no tiene acceso a Internet ni a libros; 360 mil niños podrían obtener información gratis.
Todos los países desarrollados están enfocados en la educación”, dijo César Elvir.
Raúl Ruiz, presidente del Club Rotario, dio a conocer que el Congreso Nacional les ofreció una donación de 10 millones de lempiras, pero hasta la fecha solo han recibido dos millones de lempiras.
“Se ha hecho una labor titánica. Esperamos que el Congreso honre ese compromiso porque ese será el dinero mejor invertido que ellos podrían dar”, dijo.
Añadió que ya se contrató al bibliotecario que hará el ordenamiento de las colecciones que formarán parte de la biblioteca.
El ingeniero Hugo Guerra manifestó que están trabajando sin descanso y que muchas paredes ya están siendo reforzadas.
Explicó que aunque el avance no es visible en la parte de
afuera del edificio porque se prometió que la fachada se conservaría, sí se está desarrollando según lo planeado.
“Desde que iniciamos el 16 de agosto,
el único contratiempo fue cuando Antropología nos paró durante dos meses, pero hemos seguido trabajando en la construcción sin detenernos”, puntualizó.
