Encadenado de pies y manos, Cristian Monje pide al alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, que los deje trabajar. Él, junto a un grupo de carreteros, personas que se dedican a trabajar con carretas haladas por caballos, llegaron este miércoles de nuevo al parque central a realizar un plantón.
Portando pancartas donde dicen que no tienen dinero para mandar a sus hijos a la escuela, que quieren soluciones, y pidiendo al alcalde que les dé la cara y que los dejen trabajar, los carreteros se mantienen en el parque central.
La protesta se debe a las medidas tomadas por la municipalidad en aplicación del Plan de Arbitrios por el maltrato animal, la prohibición de la circulación de carretas de caballos dentro del primer anillo y el hecho que los carreteros arrojan desechos en cualquier lugar fomentando los basureros clandestinos y la contaminación.
Las autoridades municipales han procedido al decomiso de animales, los que han sido trasladados al centro de rescate animal recién creado en El Ocotillo, lo que ha generado ya dos protestas en el parque central, una frente a la sede de la policía municipal en el barrio Las Palmas y otra en el Segundo Anillo.
Hoy han vuelto a protestar exigiendo que les den una solución a su problemática, pues consideran que la promesa del alcalde de los 300 empleos disponibles para ellos es puro cuento.
“No queremos paja, queremos solución” mencionan los carreteros y piden al alcalde que les dé la cara porque la situación está complicada. Aseguran que él también se ha puesto en huelga y se ha encadenado, por lo que ellos hacen lo mismo para ser escuchados.
Los afectados son alrededor de 60 personas, aunque no existe un censo de cuantas personas acarrean productos en carretas de caballos.
El alcalde Roberto Contreras ha reiterado que no hay marcha atrás en el tema.
