Adolescencia: la serie más vista enciende alarmas en Honduras

Adolescence (Adolescencia), la segunda serie de Netflix más vista esta semana en Honduras y en el mundo, enciende las alarmas entre expertos en salud mental y organizaciones que luchan contra la violencia de género por ser una trama con una considerable dosis de odio digital y misoginia juvenil.

En un país que registró 231 muertes de mujeres y más de 80,000 denuncias de maltratos en 2024, Adolescencia es, para unos, una trama necesaria que obliga a los padres de familia, maestros y Gobierno a abrir los ojos ante el acoso escolar, pero, para otros, esta serie es un detonante peligroso que podría agregar nuevos factores a la dinámica que impulsa la violencia de género.

Esta semana, Adolescencia se ubica en el segundo lugar en el Top 10 de Series en Honduras y en el Top 10 Global de Series (de habla inglesa) y, a la vez, es tema de conversación entre la audiencia por el cyberbullying y las radicalizaciones del odio misógino.

Esta miniserie, estrenada en Netflix el 13 de marzo de 2025, consta de cuatro episodios que hilvanan una trama protagonizada por Jamie Miller, adolescente de 13 años, acusado del asesinato de su compañera de escuela, Katie Leonard.

La dramática historia inicia cuando policías irrumpen en la casa de la familia Miller para arrestar a Jamie, a quien, posteriormente, lo trasladan a una sede policial, donde le abren un expediente de investigación bajo la sospecha de haber cometido el crimen contra Katie.

El inspector Luke Bascombe, uno de los personajes clave de la investigación, somete a un profundo interrogatorio a Jamie con el objetivo de extraerle la verdad, sin embargo, le resulta imposible pese a que le muestra un video en el cual, aparentemente, apuñala a la joven.

Mientras buscaba pistas en la escuela, de manera inesperada, el inspector recibe información de su hijo Adam, quien también estudia en el mismo centro educativo. En una conversación cargada de emoción, le explica que Jamie no era el monstruo que todos creían, sino un joven retraído, constantemente acosado y manipulado.

Adam le desentraña a su padre el significado del emoji 100%, el cual alude a la regla incel 80/20. Esta indica que el 80% de las mujeres se sienten atraídas solo por el 20% de los hombres. Igualmente, le explica sobre la píldora roja y el emoji de los frijoles, enviado a través de Instragram por Katie a Jamie para burlarse y llamarle incel.

En los últimos episodios, Jamie enfrenta a Briony Ariston, una psicóloga clínica que le ayuda a confrontar sus propios pensamientos. Es en esos momentos, Jamie admite haber absorbido ideas de los foros incel, los cuales lo llevaron a desarrollar un odio profundo hacia Katie.

El final de Adolescencia, trece meses después del crimen, Jamie llama a su padre, Eddie Miller, para felicitarlo por el cumpleaños y para decirle que cambiará la versión de su testimonio el día del juicio. En otras palabras, le dice a Miller (quien viaja en un automóvil en compañía de su esposa e hija) que se declarará culpable.

Nohemi Dubón, abogada activista del Foro de Mujeres por la Vida, considera que la serie Adolescencia, por un lado, llama a los padres a estar alertas ante los comportamientos de sus hijos que podrían ser víctimas o victimarios de acoso escolar por medio de redes sociales, pero, por otro lado, advierte que esta serie podría causar un efecto negativo en el país.

“Honduras es un país que históricamente ha tenido altos niveles de violencia contra la mujer a causa del machismo que ha imperado en la sociedad. Muchos hombres han matado a una mujer porque ella les ha dicho: no me gustas, no podemos continuar la relación y otras causas. Ahora, la serie Adolescencia introduce a la sociedad nuevos conceptos ideológicos relacionados como la comunidad incel y la manósfera que podrían aumentar el grado de violencia contra las mujeres”, dice.

La comunidad incel (del inglés involuntary celibate) es un grupo en línea compuesto por hombres que se autodefinen como célibes involuntarios, es decir, que desean tener relaciones afectivas o sexuales, pero sienten que son sistemáticamente rechazados por ser feos, como dice Jamie en la serie, o por otras causas.

Esta comunidad nació en internet como un espacio para compartir experiencias de soledad, frustración y aislamiento, pero con el tiempo se transformó en un entorno donde predominan discursos misóginos, fatalistas y, en algunos casos, violentos.

Esta subcultura digital, que no tiene líderes o personas que la dirijan, se articula a través de foros, redes sociales, blogs y sitios como Reddit, 4chan o foros especializados que dan forma a un conjunto de comunidades llamada manósfera (del inglés manosphere).

Ante este nuevo fenómeno social, Dubón teme que los adolescentes “copien estos conceptos y crezcan con ideas distorsionadas de las relaciones entre hombre y mujer y causar más odio y agresiones contra las mujeres”.

Cifras del Centro de Derechos de Mujeres (CDM) ponen en relieve la situación crítica que viven las mujeres en Honduras. En 2024 hubo 7,879 denuncias de violencia doméstica y 50,757 denuncias de maltrato familiar, 231 de feminicidios; entre ellos, 4 muertes de niñas de 0 a 9 años y 25 de jóvenes de 10 a 19 años

Hasta ahora en las comunidades en Reddit relacionadas con Honduras no hay debates sobre el movimiento incel y la manósfera. Tampoco estos temas son tendencia en las búsquedas en internet, de acuerdo con los registros del último mes de Google Trends.

Para psicóloga Kimberlin Villatoro, fundadora del Centro de Desarrollo Infato-juvenil, "la biografía de Jamie no representa a todos los adolescentes, sino un caso extremo que no debe ser normalizado como parte natural de la adolescencia. Aunque esta etapa implica desafíos y cambios, no necesariamente conduce a la impulsividad, desorganización o violencia".

“La serie muestra una visión enfocada en las dificultades, pero es importante recordar que la adolescencia también incluye emociones positivas, vínculos enriquecedores, sueños y creatividad. El mensaje final es claro: la adolescencia no tiene por qué ser como la de Jamie. No es rebeldía, es desconexión”, dice.

Villatoro plantea que los padres deben estar más pendientes de sus hijos para evitar o detectar oportunamente problemas psicológicos o agresiones en los centros escolares. “El cyberbullying puede pasar mucho tiempo antes de que se den cuenta, porque ocurre fuera de su vista”.

"Lo importante es la relación padre e hijo. Si hay un distanciamiento afectivo, eso hará que el adolescente no tenga la confianza para expresar sus vivencias, experiencias en el día en su entorno escolar. Hemos crecido con un terrorismo emocional. Esa ha sido nuestra crianza: autoritaria, rígida, generalmente en nuestras poblaciones", agrega.

La psicóloga ejemplifica que los padres de familia invalidan las emociones de sus hijos con las típicas frases: "No llorés", "no te enojes", "esas son tonterías" y con esto ocasionan que los adolescentes digan: "Mejor no le cuento a mi papá porque no me comprende".

Según ella, los adolescentes se aíslan y pierden la confianza hacia sus papás y cuando ocurren estas situaciones, ellos no saben qué hacer. "El cerebro se desarrolla hasta los 25 años y a veces esperamos que los adolescentes se comporten como adultos, y eso no pasará", dice.

Aclara que “lamentablemente, el cyberbullying puede llevar a consecuencias extremas en adolescentes y niños, incluyendo el suicidio. El riesgo es real y ha ocurrido en varias ocasiones en nuestro país. Aunque el suicidio nunca es causado por una sola cosa, es decir que hay un trasfondo, antecedentes, pero el bullying o cyberbullying pueden ser un disparador potente en personas vulnerables”.

Para esta psicóloga, que ha conocido casos a través de su cuenta de Instagram @kimvillatorohn, “la detección temprana, además de escuchar, observar y mantener una relación de confianza con los hijos, es clave, conocer las señales y estar atentos a cambios de conducta y emocionales. Supervisar (sin invadir) el uso de redes sociales. No minimizar lo que el adolescente cuenta. Buscar apoyo profesional si hay señales de alarma”.

Los psicólogos y organizaciones que defienden a las mujeres coinciden en que el odio no nace con los adolescentes, pero en internet encuentran personas y plataformas que los inducen para crear nuevos fenómenos, como ocurrió en el pasado.

En 1995, en Honduras se transmitió durante varios días la película Sangre por sangre: Obligado por el honor (Blood In Blood Out: Bound By Honor, 1993), la cual impulsó la creación de maras y pandillas.

Más tarde, se difundió las narconovelas y series colombianas, Sin tetas no hay paraíso (2006), El cartel de los sapos (2008), El capo (2009), Las muñecas de la mafia (2009), Pablo Escobar, el patrón del mal (2012) y otras producciones que se convirtieron en el preámbulo de la ola de violencia causada por el narco que provocó la muerte de más de 59,000 personas entre 2010 y 2021, de acuerdo con las estadísticas de la Policía Nacional.