Tegucigalpa, Honduras
“El nuevo Congreso Nacional podría definir la situación futura del país, porque se escoge nueva
Corte Suprema de Justicia (CSJ) y nuevo
Fiscal General de la República. Además, los diputados que asuman en enero de 2022, pueden hasta eliminar el convenio de extradición”, recalcó.
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Ante tal escenario, Galo reconoció que “todos esos elementos hacen ver un panorama oscuro y que no se sabe a ciencia cierta cómo se están manejando en este momento los hilos de la corrupción y el narcotráfico en el país'.
Ismael Zepeda Galo, economista del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), avizoró un panorama de incertidumbre política para las elecciones presidenciales del próximo 28 de noviembre de este año.
“El panorama político para las elecciones generales es de incertidumbre, sobre todo porque no se reestructuraron de la mejor manera instituciones como el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE), que ni ley tienen”, dijo Galo a La Prensa.
Advirtió que a pesar de que se aprobó una nueva ley electoral que, a su criterio, “no tiene nada de trascendental”, los comicios generales se desarrollarán casi con las mismas reglas del proceso electoral de 2017.
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Galo puntualizó que, ante la polarización de los partidos políticos y los múltiples señalamientos por corrupción y narcotráfico contra candidatos a cargos de elección popular, difícilmente habrá un buen gobierno para el 2022.
“Al final, los candidatos que salgan electos, sobre todo aquellos pertenecientes a los partidos mayoritarios, como el caso del Partido Nacional y Liberal, que enfilan en sus planillas a involucrados en actos de corrupción en las instancias que han manejado, van a seguir manteniendo el estatus quo, es decir, el sistema de corrupción de las personas que los pusieron ahí”, aseguró.
IMPORTANCIA DE UN NUEVO CONGRESO
El economista del Fosdeh resaltó la importancia que tiene el elegir nuevas caras en el Congreso Nacional, ante la amenaza de que los candidatos a ocupar un curul en ese poder del Estado, busquen continuar en sus puestos de privilegio como diputados, incluso cuando han sido señalados por corrupción.
 Actualmente, el Congreso Nacional es dominado por el oficialismo (Partido Nacional) con 61 diputados, más el apoyo de otros partidos minoritarios que alcanzan al menos siete diputados.
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Ante tal escenario, Galo reconoció que “todos esos elementos hacen ver un panorama oscuro y que no se sabe a ciencia cierta cómo se están manejando en este momento los hilos de la corrupción y el narcotráfico en el país'.
Finalmente, reiteró que el presidente y los diputados que, resulten electos en las próximas elecciones, tienen grandes retos y desafíos en cambiar el viejo orden político, luchar contra la corrupción y la impunidad, y resolver el tema de las Zonas Especiales de Empleo y Desarrollo (Zede), que han causado polémica recientemente.
