04/12/2025
12:59 AM

El poder de creer

Emilio Santamaría

Hace ya muchos años el Club San Antonio de béisbol estaba dirigido por Josh O. Reilly, tal vez el más astuto gerente de la liga de Texas. En el equipo jugaban verdaderas estrellas del deporte. Siete tenían un porcentaje de bateo de más de trescientos. Todo mundo suponía que arrasarían en la temporada. Pero no fue así.

Aún con el Dallas Club, que era muy inferior, el San Antonio solo pudo dar un hit. Y lo logro ¡el pitcher! Estaban tan decaídos que perdieron diecisiete de los veinte primeros juegos. La situación era catastrófica. Josh comprendió que no era por falta de habilidades, ni de conocimientos. No bateaban porque “no creían” que podían.

No “esperaban” conectar de hit. Y esta actitud era la que los inhibía, les enfriaba los músculos y les impedía jugar con energía. Literalmente atraían la derrota.

El Dr. Norman Vincent Peale, que cuenta esta anécdota en su libro “El poder del pensamiento tenaz”, relataba que en el vecindario vivía un predicador muy popular llamado Shlater. Aparentemente lograba resultados sorprendentes como curandero por la fe. Así que Josh, profundo conocedor de su gente, tomó unos bates, los puso en una carretilla y los llevó a bendecir por Shlater a fin de conferirles poder. Al día siguiente, relata una crónica de Hugh Fullerton, el legendario cronista deportivo, los jugadores del San Antonio arrasaron al Dallas, conectándoles 37 hits y ¡provocando 20 carreras! ¿Piensa usted que la diferencia estuvo en los bates? Estoy seguro de que Josh O. Reilly sabía que estaba en la mente de sus jugadores. Empezaron a pensar con esperanza, no con duda. Dejaron de pensar en la derrota, esperaron hits, carreras, victorias y lo lograron.

Dale Carnegie en su libro “Cómo suprimir las preocupaciones y disfrutar de la vida”, que es un clásico de la literatura universal de autoayuda, dice: “llene su mente de pensamientos de valor, confianza, seguridad, salud y eso conseguirá”. Y la Biblia, en uno de sus pasajes más instructivos lo apoya: “De acuerdo con vuestra fe, así os acaecerán las cosas”.

LO NEGATIVO: Quitarnos mentalmente potencia, al llenarnos de dudas y de pensamientos derrotistas.

LO POSITIVO: Energizarnos al tener la certeza de que “si podemos creer, todas las cosas serán posibles para el que crea”.

las columnas de LP