01/05/2024
12:26 AM

Calles estranguladas

José Azcona

Otra acción importante para mejorar el congestionamiento vial es recuperar o construir las conexiones entre vías existentes. Una vista al mapa real vial de la ciudad nos indica que existe una enorme cantidad de callejones que debiesen conectar a las calles vecinas, pero fueron prolongados. Al no tener utilidad inmediata, estos han sido usurpados por los propietarios de los predios colindantes, en algunos casos.

Entre urbanizaciones muchas veces se habían previsto conectores que nunca se desarrollaron. También vemos que aíslan urbanizaciones de grandes extensiones, pero con un solo acceso, afectando la circulación general y la de los residentes. Al cerrarse los posibles pasos, los mismos, con el tiempo, son privatizados; este es un problema mucho más difícil de resolver en el futuro, ya que perjudicará a terceros. Por tanto, se debe exigir un acceso público cada cierta distancia en una urbanización, y hacia todas sus calles colindantes, y prohibir el cierre de este.

Para el desarrollo futuro, deberá quedar como norma la obligatoriedad de integración a las vías primarias de forma pública de formas múltiples, y dejar las vías de alivio y principales definidas para proteger sus derechos de paso futuros.

Como se está desarrollando la ciudad, parece que más allá del anillo periférico no existe ninguna previsión de integración vial, lo limitará el crecimiento de la ciudad.

A algunos propietarios les puede parecer que privatizar las calles y no dejar pasos públicos (unido a la indiferencia gubernamental), es en su interés. Esto es una visión muy a corto plazo, porque la plusvalía inmobiliaria depende en gran medida de la accesibilidad, ayudando a sus bienes ya desarrollados y a sus propiedades agrestes contiguas que pueden pretender lotificar después.

Es en interés de la comunidad ir resolviendo este problema. Un sistema vial funcional es un factor importante para mejorar de la calidad de vida de todos.