La misión OSIRIS-REx se lanzó el 8 de septiembre de 2016, alcanzó al asteroide Bennu el 20 de octubre de 2020 y se acerca a la Tierra trayendo una muestra. La fecha prevista es el 24 de septiembre de 2023.
El 21 de septiembre de 2022, OSIRIS-REx encendió sus propulsores durante 30 segundos y se impulsó hacia la Tierra. Así se llevó a cabo la primera maniobra con la cual se cambió su trayectoria.
Después de ese ajuste de dirección, OSIRIS-REx pasaría a unos 2,200 kilómetros de la Tierra, sin embargo, en julio de 2023 comenzaron una serie de maniobras que le acercarán a los 250 kilómetros.
A esa distancia estará suficientemente cerca para liberar la cápsula de muestra y lograr que aterrice en paracaídas en el campo de pruebas y entrenamiento de la Fuerza Aérea de Utah, en el Great Salt Lake Desert.
El Johnson Space Center de la NASA construyó un laboratorio de conservación específicamente para almacenar la muestra. También supervisará la distribución de las porciones a científicos de todo el mundo.
Custodiará y preservará una gran fracción para que la estudien las generaciones futuras, como sucedió con las muestras del programa Apolo, algunas de las cuales se están abriendo para estudiarlas con nuevas tecnologías.
Actualmente, la nave espacial se encuentra a una distancia de 38.6 millones de kilómetros de nuestro planeta, viajando a una velocidad de aproximadamente 35,000 kilómetros por hora.
Para llevar a cabo la entrega, debe acercarse a la Tierra a una velocidad y dirección precisas y “dejar caer” la cápsula con la muestra en la atmósfera terrestre, el ángulo debe ser el correcto, ya que de otra forma rebotará en la atmósfera.
Como rebotan en la atmósfera ciudadana las acciones partidarias de la “consulta popular” y acusar al BOC.