Tras la contundente victoria electoral de Donald Trump en los comicios presidenciales de Estados Unidos, surge una nueva interrogante en ese país, ¿qué pasará con los casos penales y civiles tras su triunfo?
El magnate neoyorquino fue condenado este año por un tribunal de Nueva York por haber falsificado registros comerciales para comprar el silencio de la actriz de cine para adultos Stormy Daniels durante la campaña electoral de 2016.
El republicano sigue pendiente de sentencia por este caso, que se aplazó después de que el Tribunal Supremo dictaminara que los exmandatarios del país gozan de una amplia inmunidad judicial.
El juez del Tribunal Supremo de Nueva York que preside el caso, Juan Merchan, ha retrasado la sentencia hasta el 26 de noviembre tras varias mociones de la defensa, que alegaba interferencia electoral.
Antes de ganar las elecciones, Trump afrontaba hasta cuatro años de prisión, pero los expertos apuntan que lo más seguro es que Merchan opte por una sentencia de libertad condicional con visitas periódicas a una corte o aplace la sentencia hasta que el magnate cumpla su mandato.
Potestad para cerrar investigaciones
El republicano también fue imputado por otros tres casos, entre ellos el del asalto al Capitolio.
Pero ahora como presidente tendrá potestad para ordenar al Departamento de Justicia que cierre las investigaciones en su contra.
El mandatario electo también afronta un caso en Georgia por interferencia en las elecciones de 2020.
Según las acusaciones, Trump y 18 colaboradores presionaron a funcionarios del Gobierno de Georgia para que alteraran los resultados de los escrutinios en los comicios que el entonces mandatario perdió por poco menos de 12.000 votos. El caso está estancado.
En Florida, el magnate enfrentaba otra acusación por manejo indebido de documentos clasificados. El caso fue desestimado el 15 de julio por la jueza federal Aileen Cannon.
Trump se ha declarado inocente en los cuatro casos penales que arrastra, en los que su estrategia ha sido dilatar al máximo los procedimientos y ha salido beneficiado del dictamen del Tribunal Supremo de EE.UU. de julio pasado, que le otorga inmunidad presidencial parcial.
El exmandatario dijo durante la campaña que de ganar las elecciones despediría al fiscal especial Jack Smith para terminar con los casos federales en su contra relacionados con su intento de revertir la elección presidencial de 2020, según CNN.