No todos los días el presidente de los Estados Unidos se aparece en una boda para felicitar personalmente a los novios sin conocerlos. Esto fue lo que sucedió con Barack Obama en San Diego, donde practicaba su deporte favorito en el campo de golf Torrey Pines, al mismo tiempo que una pareja celebraba su recepción.
Brian y Stephanie Tobe sabían que el mandatario se encontraba en el mismo lugar, pero nunca imaginaron que tendrían la oportunidad de saludarlo. 'Una vez que lo vimos venir yo sólo puse mi cara contra la ventana, porque habíamos sido obligados a ir dentro, y no nos permitían salir al balcón. Esperaba que notaran mi vestido de novia,” declaró Stephanie.
Fue en ese momento que la novia tomo la decisión salir corriendo, con su vestido de boda y tacones, hacia el presidente Obama. “Uno no tiene esa oportunidad tan seguido así que por qué no hacerlo,” cuenta Stephanie, y por supuesto, detrás de ella también corrió el novio.
La novia no se creía que el presidente de los Estados Unidos estuviera en su boda.
|
Así, el invitado sorpresa se convirtió en la sensación de la fiesta del matrimonio Tobe.